Capítulo II
Por: Jesús Victoriano López Vega
En 1984 el nivel del Lago estaba muy bajo, apareciendo infinidad de ollitas de barro y de diferentes formas de utensilios, animales, rostros etc. Lo que me despertó interés en saber su origen, que por lógica tenía que ser en relación al Lago.
En 1986 la laguna se estaba recuperando de una de tantas sequías. A finales de julio de ese mismo año, me tocó ver desde la loma del cerro de las “antenas” una nube alargada y renegrida que estaba extendida sobre el horizonte del lago, se le veía una especie de torbellinos que absorbían agua en forma de embudos. Al día siguiente azotó, “picó” esa nube en forma de culebra en varios puntos del cerro, uno de ellos fue cerca al tercer salto del arroyo del “Tepálo” provocando un gran deslave en la vereda.
Posteriormente en 1999 por el mes de mayo antes de la temporada de lluvias, hubo un fuerte viento en forma de ciclón que provocó un gran zumbido que venía del poniente arrastrando polvo renegrido de las salitreras de los lagos secos por el rumbo de Sayula y Tzacualco de Torres.
Recuerdo que para ese entonces yo traía de brazos a mi hija y antes de que sucediera todo esto mi esposa tuvo un presentimiento; agarró de la mano a mi hijo porque vimos que el oleaje de la laguna empezó a ponerse “chinito”, (según los pescadores este oleaje lo conocen como “miraje” muy frecuente durante luna llena, cuando la marea está alta y cuentan que es cuando la laguna está enfurecida y algo está propenso a pasar, como una fuerte tempestad o ciclón).
En cuestión de minutos corrimos a casa de mi mamá porque el cielo se oscureció con polvo ceniciento, que era difícil de ver a distancia de cinco metros. Vi como chocaban a gran velocidad esas nubes grises en el cerro del “Pando de abujas” que venían del poniente. La gente que estaba ese domingo en la laguna, corría desesperada semejante a un hormiguero cuando está alborotado… letreros, anuncios y ramas de árboles resquebrajados y otros chocaban en las paredes de las casas que apenas se distinguían por el tizne, yo le cubría la cara a mi hija causa del polvo negro. Recuerdo que pregunté a los ancianos de ese entonces si habían visto algo semejante de lo sucedido anteriormente, dijeron que no habían visto pasar algo así antes. Hay que recordar que la laguna en ese tiempo estaba muy baja en su nivel y que posiblemente este suceso sería por su resequedad.
Y para el año 2008 a principios de agosto, casi la mitad del pueblo de San Juan Cosalá fue devastado por otra tromba que cayó en sus cerros, esto ocurrió por la mañana, provocando un gran deslave en el fraccionamiento Raquet Club, muchas de las casas quedaron tapadas de lodo y otras destruidas por grandes piedras. Desde Ajijic se veía un ambiente oscuro y nublado, a la hora y media se escuchaban las noticias de lo sucedido por la radio. Afortunadamente la gente más afectada pudo huir del suceso. Y no hubo reportes de muertes.
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