MEZQUINOS, VERRUGAS Y OJOS DE PESCADO:
Por: Ili
Sí, ya sé que este título suena a cosa de brujería, pero esta columna tratará de algunas de las afecciones de la piel más comunes.
Los mezquinos aparecen por infecciones en la piel que atacan a las células, deformándolas y haciéndolas más grandes. Es probable que desaparezcan por si solos, pero de no ser así, existen tratamientos para su eliminación. Se presentan como abultamientos engrosados, irregulares y duros de los colores de la piel, gris, amarillentos o pardos. En zonas del cuerpo sometidas a constante fricción. El tamaño varía, siendo de un par de milímetros hasta casi un centímetro.
Su tratamiento para la eliminación consiste en la aplicación directa de agentes queratoliticos, ácido salicílico, extirpación quirúrgica por medio de criocirugía, electro desecación y laser.
Las verrugas son causadas por un virus del papiloma humano. Su contagio está altamente relacionado con un sistema inmunitario bajo y el contacto directo con una superficie afectada. Pueden ser adquiridas a cualquier edad, pero en su mayoría la gente mayor es quien las desarrolla.
Los ojos de pescado son lesiones cutáneas que aparecen en la planta de los pies, las cuales son bastante dolorosas puesto que se invaginan en el mismo por la forma de caminar. Son verrugas también derivadas del virus del papiloma humano, pero únicamente aparecen en los pies. Suelen presentarse de forma similar a los callos, de superficie redonda, plana y grisácea. Sin embargo debido a la constante fricción, ocurre sangrado en el centro e interior de la lesión y de aquí el nombre de ojo de pescado puesto a que a eso se asemeja.
El virus se introduce en la piel por medio de las vías de entrada como cortadas, caminar descalzo en superficies sucias y al estar en contacto directos con áreas de la piel de las personas infectadas. Llegan a medir en la planta de los pies hasta 3cm y pueden desarrollarse en otras áreas del cuerpo cuando se les rasca y se toca otra área de la piel.
Los ojos de pescado llegan a ser tan dolorosos que algunas personas describen la incomodidad parecida a tener la sensación de un constante picoteo de la punta de un alfiler.
Como opciones de tratamiento para estas afecciones desagradables en la piel, y como en todas las columnas les recomiendo acudir al especialista de salud en cada área. En este caso el podólogo y/o dermatólogo. Para que le ofrezca opciones de tratamiento como pomadas y ungüentos medicados; inyecciones, electro-cauterización, congelamiento (crioterapia), laser y remoción quirúrgica.
Sea cual sea el brote que presenta, atiéndase y no espere a tener todo un racimo virulento.
Que a Usted no le importa la estética, bueno caiga en la cuenta de que los mezquinos, verrugas y ojos de pescado no solo lo hacen ver repugnante si no también lo convierten en un cultivo andante de bacterias contagiosas. Que no se le ven y no le molestan, no haga desidia. Más vale atenderse a tiempo y aprender a prevenir la aparición de futuros granos. Atiéndase, su piel siendo el órgano más grande del cuerpo, se lo agradecerá.
Foto: cortesía.
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