Tradición contra el tiempo
Es común caracterizar a Jocotepec como “un pueblo lleno de tradición” (una afirmación muy utilizada por personajes locales al momento de exponer las cualidades del pueblo), y es verdad que conserva hasta el momento muchas de sus más representativas tradiciones; sin embargo, la mayor parte se mantiene gracias al trabajo de un pequeño grupo de personas y aquellas otras que poseen una participación abundante corren el riesgo de estar perdiendo su esencia, sus elementos o influencias principales.
Las tradiciones nacen a partir de un hecho significativo y posee carga histórica, se fomentan y perseveran mediante el conocimiento y labor colectiva, pasan a formar parte de la educación cultural que se transmitirá a las nuevas generaciones, siendo esto el elemento clave para su preservación, pues en el instante en que deje de compartirse el conocimiento acerca del origen y auténtico proceso de elaboración comenzarán a deformarse y, finalmente, a perderse.
Fiestas tradicionales de carácter religioso, por ejemplo, se han alterado de manera que sus principales elementos, como la ceremonia religiosa o las distintas procesiones por las calles del pueblo, van perdiendo fuerza dado que en ellas participan solamente una pequeña parte de la población en comparación a la que disfruta del festejo pagano que las acompaña.
Fomentar las tradiciones se logra de manera más efectiva cuando se educa acerca de ellas y no sólo se muestra el resultado final, como en el caso de la elaboración de artesanías y de productos locales. Estos trabajos se mantienen en gran medida debido a que familias completas o grupos sociales se han dedicado a ello desde generaciones pasadas, siendo transmisores del conocimiento, por simple amor a la profesión o por resultar una buena o única fuente de ingresos.
Son pocas aquellas las tradiciones que se mantienen fielmente, además de contar con una constante participación, esto se debe, en la mayoría de los casos, a que poseen una propiedad que resulta atractiva para la población. La mayor parte de este tipo de tradiciones son las que proporcionan un espacio y ambiente de diversión, baile y música popular, y aún dentro de ellas existe una selección, pues lo tradicionales bailes que se realizan en enero tienen más asistentes que los de septiembre.
Resaltar y elevar la tradición del pueblo debe ser más que un elemento del discurso, debe ser tarea de sus habitantes el encargarse de que las tradiciones perduren y el elemento histórico que contienen sea parte del conocimiento que se compartirá en años venideros. Dar paso a nuevas tradiciones es un acto normal de una sociedad que se adapta y moldea a lo que conocemos como modernidad, sin embargo, el conocer la historia y ser capaces de preservar las antiguas es parte de generar una identidad para el pueblo.
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