El champú y los jabones con permetrina al uno por ciento matan normalmente en la primera aplicación todos los piojos vivos, pero no las liendres
Redacción.- La época de los piojos suele empezar en octubre y sigue hasta la temporada de calor. La concurrencia de los individuos en los planteles escolares es una fuente factible de contagio. Cuando la infestación es grande los piojos y las liendres, pueden observarse a simple vista.
Las medidas de prevención tienen que ver básicamente con la revisión periódica del cuero cabelludo de los menores al inicio del ciclo escolar, ya que es el sitio en donde regularmente ocurre la infestación del parásito en los escolares.
“Esta enfermedad se trasmite muy fácilmente por contigüidad aún en las personas muy limpias. Aunque es más frecuente en personas con mala higiene y que habitan lugares con hacinamiento o que utilizan o comparten: peines, cepillos, gorras, pañoletas, sombreros, entre otros accesorios más”, explicó la coordinadora estatal de Urgencias Epidemiológicas y Desastres de la SSJ, Ana Gabriela Mena Rodríguez.
Además, es importante señalar que los piojos usan sus garras para adherirse a la base del cabello durante el cepillado y lavado. Muerden el cuero cabelludo para alimentarse de sangre y su saliva produce una intensa picazón, que es el principal síntoma, la persona se rasca haciéndose heridas que pueden infectarse. Se aprecian con mayor facilidad cerca de las orejas o arriba de la nuca.
Por su parte, Fernando Castillo Saldaña, director de Participación Social de la SSJ, explicó que la pediculosis es una enfermedad causada por el ectoparásito pedículus (piojo). Es una infestación parasitaria de la piel del cuero cabelludo, el tronco o el área púbica”.
Existen tres variedades diferentes de pediculosis: pubis, piojo del pubis o ladilla; corporis, piojo del cuerpo; y capitis, piojo de la cabeza. El ciclo vital consta de tres fases, huevos (liendres), ninfas y adultos. El piojo se desarrolla totalmente en el hospedero (el humano), ya que fuera de él no puede sobrevivir más allá de 24 horas por falta de alimento y la temperatura.
SÍNTOMAS
Una sensación de cosquilleo, de algo que se mueve en el cabello. Granitos en el sitio donde pica el piojo (cabeza y cuerpo). Se irrita el cuero cabelludo, causando ardor, causa comezón y al rascar presenta heridas profundas en el área afectada que pueden infectarse.
DIAGNÓSTICO
El diagnóstico se establece mediante los síntomas y la inspección del cabello de la persona afectada. Cuando inicia la infestación, los insectos adultos pueden confundirse en el cabello oscuro. La hembra deja pequeños huevos blancos o de un brillo plateado (liendres) que se pegan a la base del cabello aproximadamente a medio centímetro del cuero cabelludo.
DETECCIÓN DEL PROBLEMA
TRATAMIENTO
El champú y los jabones con permetrina al uno por ciento matan normalmente en la primera aplicación todos los piojos vivos, pero no las liendres. Después de una semana o dos, deberán repetir el tratamiento toda la familia.
Además, complementar con el uso de un peine con dientes finos facilita el quitar las liendres. Otra medida igualmente importante a la hora de prevenir una nueva infestación es lavar o limpiar en seco toda la ropa personal y de la cama.
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