Arcelia, la principal encargada de la obra, invitó a los ajijitecos a apoyarlos con material, cemento, arena, brochas y pintura
Arcelia (en el centro) y su grupo de amigos (tres de ellos de San Juan Cosalá), quienes no la han dejado desde que inició su proyecto de darle una nueva “cara” al Templo de San Andrés Apóstol.
Domingo M. Flores (Ajijic). – Lo bien cuidado que se encuentran los templos en los pueblos que María Arcelia Real Ramos ha visitado, además del amor que siente por el santo patrono de su comunidad, la impulsaron a reunir voluntarios para pintar el deteriorado ingreso y la barda perimetral de la parroquia de San Andrés Apóstol, en Ajijic, la cual tenía más de seis años de no haber recibido ninguna “manita de gato”.
“…Voy a todos los pueblos y donde quiera están sus templos bien bonitos. Yo decía [que la parroquia de San Andrés Apóstol] no se debe de quedar abajo. Fue motivo de hablar con el Señor Cura [y preguntarle]: ¿Me da permiso de pintarle el templo a San Andrés? Me ofrecí como voluntaria. [Voluntarios] no tengo muchos, pero [esos] poquitos estamos de corazón”, expresa con una franca sonrisa, Arcelia, conocida en la comunidad por pintar desde un lienzo hasta casas y letreros publicitarios.
Sin embargo, Arcelia y sus amigos (tres de ellos de San Juan Cosalá) no sólo pintarán la fachada, también tienen planeado darle su “manita de gato” a la torre ubicada a varios metros de altura. Todo voluntariamente, es decir, sin cobrar un peso por su trabajo.
La colosal tarea inició el dos de enero y se tiene planeado terminarla en la Semana Santa, de acuerdo al rápido cálculo de la entrevistada, quien también realizó recolecta económica y de materiales, tanto con vecinos, paisanos, así como con la Delegación.
“La ayuda ha sido poco a poco, pero buena”, expresó Arcelia, quien también agradeció a los locales por enviarles comida a ella y a su grupo de amigos que a diario por las tardes arriban a engarrar y pintar el templo de San Andrés Apóstol, ubicado en zona centro de Ajijic. “Son mis tres Reyes Magos de San Juan”, menciona, refiriéndose a los tres hombres que vienen de la población vecina a realizar los trabajos de rehabilitación.
Arcelia invitó a los ajijitecos a apoyarlos con material, cemento, arena, brochas y pintura, pues para pintar la fachada y las paredes del atrio, calcula que se necesitarán al menos 20 cubetas.
Como el personal no es suficiente, también se invita de 11:00 de la mañana a 2:00 de la tarde y de 5:00 de la tarde a 7:00 de la noche a voluntarios que se sumen a la causa y ayuden a pintar la fachada y la barda perimetral del atrio, del cual, a decir de Arcelia, el color quedará como estaba antiguamente pintado.
“El señor cura quiere el mismo color ―beige con tinto―., ya que, es el que se utiliza en la mayoría de los templos y por órdenes superiores se tiene, que respetar informó la entrevistada.
Sobre la dificultad para pintar la torre de la Iglesia dijo: “Los muchachos más que nada dicen que sí se animan a pintar porque pintaron en San Juan también ellos la torre [de su templo]”.
Arcelia aprovechó para agradecer la comida enviada a su equipo de trabajo por Lily “La Talabartera”, Rosario “La Costurera” y Sandy Hinojosa. Finalizó diciendo, “Arriba con ese ánimo, seguimos recibiendo voluntarios y apoyo”.
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