Los ribereños deben ganar sus últimos partidos de la temporada para poder avanzar a la siguiente fase del torneo
El 11 inicial de Chapala previo al arranque de un encuentro. Foto: Especial
Iván Ochoa (Chapala, Jalisco).- Lo que parecía una calificación segura a Liguilla tras cuatro torneos de ausencia se ha convertido en un mar de plegarias.
Hasta hace dos semanas Charales se encontraban en zona de calificación con una considerable ventaja sobre sus más cercanos perseguidores, pero el perder seis de sus siete compromisos, ante clubes que también pelean en la parte alta de la tabla, lo están condenando a un año más a no luchar por el título.
Ahora, con 58 puntos cosechados y colocado en la décima posición, se encuentran fuera de puestos de Liguilla. A pesar de que son solo tres puntos los que le saca el último clasificado a la fiesta grande y que sus últimos tres compromisos de la campaña son contra escuadras que no han tenido la mejor de las participaciones, sus aspiraciones de calificar se ven un tanto reducidas, ya que los conjuntos con los que lucha tienen la misma cantidad de partidos a disputar y otros uno más ante escuadras un tanto accesibles.
Para los ribereños el tener un buen arranque en la segunda vuelta del torneo sería clave para acceder a la siguiente fase y lo lograron, cosecharon 20 puntos durante las primeras 10 jornadas ante clubes poco incómodo. Pero el haber perdido encuentros claves contra escuadras como Catedráticos Elite (1-0), Deportivo Cafessa (2-0), Club Deportivo Tepatitlán de Morelos (1-0), Club Acatlán (2-0) y Gorilas de Juanacatlán (2-1) -que son equipos que también pelean por un boleto a la siguiente etapa- los están dejando sin reales aspiraciones. El único juego que ganó de estas características fue ante Aves Blancas (3-2), y con muchas complicaciones.
A la temporada le quedan únicamente tres fechas para finalizar su fase regular, pero hay equipos que aún les falta por jugar cuatro encuentros, cosa que pone en desventaja al equipo del pueblo. Para no depender de otros resultados, Charales debe ganar los últimos puntos restantes (nueve) del certamen, pero en caso de ser necesario, tendrá que esperar una serie de combinaciones de otros cotejos que le favorezca en la tabla de posiciones.
Sus rivales en turno son: Tornados de Tlaquepaque -encuentro que estaba en trámite antes del cierre de esta edición- Salamanca FC y Gallos Viejos de Tesistán. La buena noticia para los ribereños es que durante la primera vuelta de esta temporada no perdió ante ninguna de estas escuadras (un triunfo y dos empates); la mala es que ahora deben ganar los tres encuentros para tener la mínima posibilidad de avanzar a la siguiente fase del campeonato; cualquier empate o derrota lo dejarían con muy pocas aspiraciones de avanzar.
Pero las cosas pueden ser diferentes. En caso de que Tapatíos Soccer, Catedráticos Elite, Club Acatlán y Club Deportivo Tepatitlán de Morelos ganen sus próximos dos compromisos, en automático Charales se estaría despidiendo del certamen, y condenado a ser el único equipo en la historia de una administración pública del municipio en no pasar a la siguiente fase del torneo, por lo menos en una ocasión, en sus tres años de gobierno.
Lo que es una realidad es que su veladora sigue encendida.
El dato: Tiene cuatro temporadas consecutivas Charales que no clasifica a una Liguilla
Para saber: La última vez que se clasificó a una fase final fue campeón de grupo
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