DELEGACIÓN EN AYUNAS
El Lago de Chapala. Foto: Héctor Ruiz.
Por: Daniel Jiménez Carranza
En la actualidad, las organizaciones existentes, de cualquier tipo, son entidades estructuradas para un propósito específico, lo que les permite enfocar sus recursos para lograr su objetivo; en función de ello, cuentan con una estructura orgánica, que delega responsabilidades a cada área específica lo que les permite funcionar como tal, evitando la duplicidad de funciones, racionalizando el uso de recursos materiales, equipo y herramientas, capacitando a sus integrantes, a través de herramientas administrativas que identifican los alcances de sus funciones específicas.
Esta premisa organizativa, existente en los países que han alcanzado un alto grado de desarrollo, ha sido fundamental para lograr ese estatus, que necesariamente en mayor o menor medida, se refleja en la vida personal de sus habitantes, representando una base de respeto y orden en la vida comunitaria de las poblaciones. Con todo esto, no necesariamente representan el ideal de sociedades perfectas, en donde todo funciona impecablemente, con ausencia de conductas transgresoras del orden común, no, simplemente constituyen parámetros sociales que marcan el devenir del individuo en sociedad.
En nuestro país, aún nos mantenemos a la zaga de este tipo de orden y disciplina, pues el tipo de empresas existentes, han sido de origen familiar o de emprendedores que han ido creciendo sobre la marcha, obviando en muchos casos este tipo de mecanismos administrativos que les permita racionalizar sus recursos, lo que ha representado un desarrollo tardío y costoso, frente a las grandes firmas extranjeras que se han instalado con una estructura administrativa que además ha generado fuentes de trabajo y cuantiosos dividendos.
En el orden de servicios públicos, esta imperfección es más notoria, particularmente en el nivel de gobierno municipal, como es el caso de la Delegación de Ajijic, en donde con el reciente colapso del pozo de Villa Fontana en Ajijic, dejó de abastecer de este fundamental líquido a una gran zona de la colonia Rancho del Oro por más de una semana, fenómeno que cuando se le reportó al delegado, simplemente él indicó que esto dependía de SIMAPA, dando a entender que esa delegación no tenía nada que ver con este hecho; de la misma manera, que el jefe de la oficina de limpia, al reportársele recientemente que el servicio de recolección de basura no se había dado desde hace 6 días, ni siquiera estaba enterado, argumentando que el servicio estaba concesionado, pero que lo vería.
Los servidores públicos deben entender que el servicio que prestan a la comunidad es fundamental, y que al ocupar un cargo dentro del Ayuntamiento, es imperioso informarse de las tareas y responsabilidades atribuibles al puesto que ocupan, y que constituya su pasión, y no necesariamente, un placentero lugar donde percibir un sueldo por su ominosa presencia.
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