Pablito Macrabrito en su presentación dentro del Ecléctico Fest, en el festival Que viva la muerte. Foto: Ecléctico Fest.
Redacción.- Los jóvenes y no tan jóvenes rockeros, disfrutaron de una noche llena de música con la presencia de iconos del rock en español y también del talento local, durante la noche del domingo 30 de octubre, en el Ecléctico Fest, realizado en el marco del festival “Que viva la muerte”.
Campa Valdéz, acordeonista e integrante de la banda regiomontana, “El Gran Silencio”, fue parte del concierto, y puso a bailar a todos al ritmo de la fusión rock y vallenato. También estuvo presente “Pablito Makabrito”, el enmascarado vocalista de la banda tapatía “Machingon”, así como Cala de Villa, vocalista de “Rostros Ocultos”, quien hizo cantar a los asistentes con temas como “Tiempo de cambiar” y “El final”.
Aunque hubo menor presencia que el concierto realizado en las fiestas de enero y se contó con un escenario más modesto, la plaza de Jocotepec se vio llena de las personas que pasaron un buen rato disfrutando de música alternativa.
Otros de los presentes fueron Danyela Rubens, Chris Mufasao, “Zigo Crew Mx”, “Mariachi Real Axixic” y el reencuentro de “Asuntos Varios”. El concierto fue realizado por el Gobierno de Jocotepec, a través de la Dirección de Cultura e integrantes de Ecléctico Fest.
Una de las tumbas adornadas para una niña, junto a los adornos de una persona adulta. Foto: Armando Esquivel.
Armando Esquivel.- Con gran afluencia de personas fue como se vio el cementerio de Jocotepec durante el Día de Muertos, quienes visitaron a sus difuntos en esa fecha tan especial.
El panteón contó con muchos colores debido a las flores y coronas que pintaban el lugar, con familias que prepararon sus alimentos para estar cerca de sus familiares y amigos, como Ramiro, que en familia pasó el rato a un costado de la tumba de su padre, fallecido hace año y medio.
“Lo extrañamos como siempre, extrañamos sus abrazos, sus besos y pues tenerlo aquí”, comentó el señor Ramiro Pérez, estuvo desde mediodía hasta la noche en el panteón.
Otros llegaron un poco más tarde, pues el trabajo limitó la posibilidad de llegar temprano, pero no la de asistir con el ánimo de acompañar a sus difuntos durante el 2 de noviembre, como es el caso de Sergio Aguilar Mora que visitaba a su padre, quien lleva cuatro años sin estar presente físicamente con su familia.
“Le estoy poniendo su macetita de cempasúchil, me traje su corona y voy a regar. Se le extraña verdad, que nos siga cuidando para que nada malo nos pase”, compartió.
Una de las visitantes comentó que no sólo en Día de Muertos asiste al panteón, sino que también en otras fechas importantes, para acompañar a su hija, quien falleció de pequeña.
“Cada año venimos a adorarle, pero venimos no nomás en estas fechas, venimos cuando es su cumpleaños, como hace un mes, mi hija cumplió 15 años y venimos a adornarle con globos, también en el día del amor y la amistad le venimos a traer sus cositas”, dijo la señora Patricia Elvira Jiménez.
La señora Mercedes Cortés visitó a sus abuelos, a su tía, pero en especial a su sobrina, extrañándolos a todos, pero sabiendo que algún día se reunirán nuevamente.
“Venimos un ratito a platicarles y recordarles. Que los extraño muchísimo, muchísimo que los extraño y sí quisiera que estuvieran aquí, pero pues no se puede, pero el día de mañana ahí vamos a estar también, y vamos a estar juntos”.
Al final y cada quien a su modo, las familias y amigos estuvieron con sus familiares que ya no están presentes de manera física, sin dejar nunca morir la tradición, como lo comentó la señora Celeste. “Está bien para que no se pierdan las tradiciones porque en muchos lados ya se olvidan”.
A muchas de las tumbas se les coloca comida; la tradición dicta que el difunto disfruta de la misma, mientras convive con los presentes. Foto: J. Stengel.
Domingo M. Flores / Jazmín Stengel.- Tenían ganas de homenajearlos. Muchas de las tumbas del Panteón Municipal de Chapala que durante años estuvieron “abandonadas” fueron decoradas este año, dieron a conocer los trabajadores del lugar durante un recorrido de Laguna, el 2 de noviembre.
Aún las tumbas más humildes estaban adornadas ese día, como lo fue una de las más nuevas que por cuestión de tiempo ni siquiera se ha terminado de construir u otra que no tenía lápida, nombre, ni marca perimetral, pero sí papel de china picado, flores, veladora y comida. Los sepulcros más antiguos observados en el lugar durante la visita datan de 1928, de otras el nombre y fechas son ilegibles.
De acuerdo a la Unidad de Protección Civil y Bomberos de Chapala (UPCB), al panteón municipal arribaron el dos de noviembre poco más de cinco mil personas, una cifra no tan numerosa, pero sí con mucho entusiasmo de demostrar el cariño por los que ya no están. El año pasado al lugar llegaron más personas, señalaron algunos de los entrevistados.
Y es que la tradición, para los más conservadores, comienza el 28 de octubre con el encendido de la primera vela blanca que tiene el objetivo de iluminar el camino del difunto. Todos los días se enciende una nueva hasta el 2 de noviembre, la tradición dicta que se debe tener una vela por cada ser querido que en la tumba se encuentra, así es como lo hace Imelda y su familia desde hace varias generaciones.
Cada visita al panteón durante esos días se aprovecha para traer decoraciones que poco a poco van formando el altar que en Chapala se acostumbra colocar sobre las tumbas. Coronas, cruces con santos, flores de papel, de plástico y naturales, así como accesorios que gustaban al difunto en vida se observan sobre la mayoría de las más de 2 mil 700 tumbas que hay en el cementerio de Chapala.
Los pétalos de cempasúchil formaron sutiles dibujos, ya sea sobre las lápidas o sobre la tierra misma. La mayoría de familias arribó al panteón el uno y dos de noviembre, normalmente el primer día para decorar el lugar y el segundo para convivir con los que después de la muerte aún nos visitan, explicó Higinio quien lleva asistiendo toda una vida.
“Nos heredaron cosas bellas que no siempre hemos sabido conservar. Es bonito platicar con ellos, darles luz y que nos den su luz, recordar sus ejemplos, regaños y abrazos”, expresó Claudio Cuevas, mientras barría y limpiaba la tumba donde descansan sus familiares.
El dos de noviembre, por la mañana se terminan de instalar las decoraciones, y comienza la convivencia. Tacos, tostada, refrescos y caguamas, hasta norteño y banda se observaban a lo largo y ancho del panteón de Chapala, cada familia recuerda a los difuntos a su manera. Sin embargo, el año pasado a pesar de las limitaciones arribó el doble de gente, muchos de ellos con botella en mano, agregó Imelda mientra comía sobre una lápida junto a la entrada.
El cementerio de Chapala cuenta con sólo cinco espacios libres y sin una propuesta para solucionar la saturación del lugar.
Michiscihualli y ánimas dando un paseo por el lago. Foto: Josué Mondragón.
Alma Serrano.- Los festejos por el Día de Muertos en San Juan Cosalá cambiaron de sede. Este año, el antiguo templo conocido como El Hospitalito, fue el escenario para las diversas actividades que deleitaron a los cosalenses el primero y 2 de noviembre.
El día primero se realizó el Paseo de Michiscihualli 2022 y una ofrenda monumental alrededor de las 7 de la tarde, en el malecón de la delegación, apreciándose un recorrido breve en canoa, para terminar con un recorrido desde el malecón hasta el El Hospitalito, acompañados por la danza, un grupo infantil de ballet folclórico y las Reinas de belleza 2022.
El miércoles 2, se realizó una misa a cargo del padre Néstor Antonio Meza Magallanes a las cinco de la tarde en el panteón y a las siete, los niños del Ballet Folclórico Infantil “Son de México” y el coro de niños “Crecer Juntos”, deleitaron al público con varias estampas en El Hospitalito.
Pese a que el evento tuvo una hora de duración y hubo una buena respuesta de parte de los espectadores, la cantidad de visitantes al evento fue significativamente menor a años previos, cuando era realizado en la plaza principal con la ofrenda monumental en el kiosco.
El altar de la “Feria de Humanidades 2022” se dedicó a la Reina Isabel II. Foto: D. Arturo Ortega.
Redacción.- El Instituto Loyola de San Antonio Tlayacapan realizó la celebración de Día de Muertos, a través de la “Feria de Humanidades 2022”, que este año se dedicó a la memoria de la Reina Isabel II, fallecida el 8 de septiembre y a la familia real británica.
Con bailes, música de gaita, calaveritas literarias, exposición de alebrijes, la elaboración de un colorido tapete, altares y un recorrido por el Panteón Loyola, se celebró la Feria de Humanidades, llevada a cabo el jueves 27 de octubre.
La coordinadora general del plantel, Laura Estrada, informó que para llevar a cabo la novena edición de la Feria de Humanidades, los alumnos investigaron acerca de la realeza británica, de Londres y quien fue la Reina Isabel II.
Con poco más de 100 personas que acudieron a la celebración, la primera de las actividades que pudieron disfrutar, fue la que los alumnos de preescolar realizaron con la interpretación del baile “El Twist del Esqueleto”, que sacó muchas sonrisas a los padres de familia.
Como invitado especial se tuvo el acompañamiento de la gaita de Rafael Gutiérrez, reconocido fundador en México de la Banda de gaitas del Batallón de San Patricio en 1997, condecorado con la Medalla del Imperio Británico y reconocido por la Reina Isabel II por sus Servicios a la Música Escocesa y la Cultura en México.
“La llorona” y “La calaca” fueron los temas que el coro de alumnos de primaria interpretó y de manera posterior se explicó la elaboración del “Tapete Loyola” que se desplegó con arenas de colores sobre la cancha de tenis, destacando la bandera británica y monumentos como el Big Ben y el Puente de Londres.
La celebración incluyó la elaboración de dos altares: el principal dedicado a la Reina Isabel II y otro dedicado a la Princesa Diana, conocida en el mundo como Lady Di y fallecida en un fatal accidente automovilístico, en el mes de agosto de 1997.
El campo empastado de fútbol se convirtió en un panteón donde los alumnos recrearon más de una decena de lápidas que fueron dedicadas a diversos personajes de la historia de la realeza europea, pero sobre todo de la británica.
Un concurso de calaveritas fue realizado, donde se leyeron los versos de los tres primeros lugares otorgados a alumnos de secundaria; también se llevó a cabo el concurso de elaboración de alebrijes, donde el alumno de tercero de secundaria, Arath Manuel Cabrera Ramírez, fue el ganador del primer lugar.
“Somos una gran familia, la cual nos llevamos en el corazón la cultura, nos llevamos en el corazón darle la mano a cada uno de los padres de familia, a cada uno de nuestros alumnos y sobre todo a los grandes maestros. Queremos que todos ustedes nos conozcan y que vengan a disfrutar de estos momentos”, concluyó la maestra Laura Estrada.
El altar dedicado a la periodista Magdalena Mondragón se llevó el primer lugar del concurso de altares en el festival Vida y Muerte 2022. Foto: J.Stengel.
Jazmín Stengel.- Los tres puntos de festejo que se tienen acostumbrados en la cabecera municipal, volvieron a lucir a la luz de las velas este 2 de noviembre.
En el Panteón Municipal las visitas comenzaron desde el 28 de octubre, y la Preparatoria Regional de Chapala empezó el festival Vida y Muerte desde el 31. En la calle 5 de Mayo los altares fueron pocos pero fieles a la tradición.
El 2 de noviembre la cabecera municipal volvió a lucir altares en todo su esplendor. Los alumnos de la preparatoria de Chapala, participaron en el concurso anual de altares, que esta edición cumplió 40 años de su fundación y los últimos 10 años se lleva a cabo sobre la avenida Francisco I. Madero, en su esquina con Paseo Ramón Corona.
Los ganadores del concurso fueron los estudiantes del grupo quinto B vespertino, quienes dedicaron su altar a Magdalena Mondragón, una de las periodistas mexicanas más influyentes del siglo XX y fueron merecedores de 6 mil pesos en efectivo. Las otras premiaciones fueron de 4 y 2 mil pesos respectivamente.
El segundo lugar se le otorgó al grupo de tercero A matutino, quienes eligieron a Benita Galeana como su personaje a honrar esa noche. El grupo de tercero B matutino logró quedarse con el tercer lugar, conmemorando a Irma Campos, quien también fue una reconocida activista en pro del feminismo y la igualdad social.
La ganadora del concurso de calaveritas fue Lizbeth Muriño Cárdenas del quinto grado A matutino, dirigido también a provocar una reflexión social en la audiencia. Mientras que los ganadores del concurso de Lápidas y Epitafios aún no se daban a conocer al cierre de esta edición.
A la exhibición de altares se les sumaron otros tantos dedicados a personas destacadas de la localidad como Jorge Luis ‘El Trokita’ Padilla Perales o Carlos ‘La Carpa’ y Miguel Rivera, bombero de Chapala. En total, sumaron poco menos de 30 altares.
Sin embargo, el auge de la celebración se vio claramente al concluir la Marcha del Silencio, que logró reunir cerca de 2 mil personas entre la calle Morelos y el Paseo Ramón Corona. El desfile fue desviado de manera imprevista a lo largo de la calle Zaragoza y hasta Raúl Navarro, debido al tráfico y las obras públicas que se están llevando a cabo.
La antes acostumbrada 5 de Mayo, tampoco dejó morir la costumbre, “pocos pero fieles” fue el lema de los vecinos que continuaron con la exhibición anual de altares para el Día de Muertos. Al igual, en el panteón de Chapala se tuvo menos asistencia que el año pasado. Sin embargo, muchas tumbas que estaban abandonadas fueron decoradas nuevamente.
El primero de noviembre, frente a la Fuente de los Pescadores en el malecón de la cabecera municipal, se llevó a cabo la presentación del grupo Amate, de música tradicional mexicana, así como el nuevo grupo músical de la preparatoria que aún no tiene nombre, ballet folklórico de la misma escuela y el Color Redes y Cantos de Chapala.
Desfile del día 2 de noviembre, que salió del Muro de los Muertos #2, ubicado en Flores Magón. Foto: Sofía Medeles.
Sofía Medeles.- Dos desfiles enmarcaron la celebración del Día de Muertos en Ajijic el 1 y 2 de noviembre, múltiples demostraciones y espectáculos que acompañaron los festejos, y cientos de participantes que se sumaron a las actividades.
Las actividades más destacadas fueron los desfiles. El día primero, se realizó el desfile de catrines y angelitos, que tenía como objetivo conmemorar a los menores fallecidos, además de que se realizó el primer encendido del Muro de los Muertos #2, ubicado al cruce de las calles Ocampo y Flores Magón.
El día 2, un gran desfile de catrines, con cientos de personas, escuelas, instituciones y particulares, además de algunos pocos carros alegóricos, y el encendido del Muro de los Muertos, entretuvo a los espectadores.
El presidente del patronato de Día de Muertos Ajijic, Domingo Márquez Flores, se dijo muy contento y satisfecho, y que pese a que hubo mucha más participación de la que esperaba, todo salió de la mejor manera. “Aunque aún hay cosas que mejorar, Ajijic siempre se presta para celebrar. Muy agradecido con todos”.
Entre las personas que se encontraban en la plaza, coincidieron en que fueron días muy amenos, sobre todo los desfiles y la amenización musical del día 2 de noviembre, que se presentó tras el desfile.
Finalmente, Márquez Flores informó que el próximo año piensan nutrir aún más la agenda, mejorando en las presentaciones artísticas, y agregando talleres gratuitos para niños, en el marco de las festividades.
Panteón de Ajijic en la misa del 2 de noviembre. Foto: Cortesía.
Sofía Medeles.- El panteón de Ajijic fue uno de los puntos que más afluencia de gente tuvo el 1 y 2 de noviembre, e incluso desde antes. Más de mil personas se dieron cita para festejar y conmemorar a sus familiares fallecidos.
Según compartió Protección Civil de Chapala, fue un promedio de entre mil doscientas a mil quinientas personas, las que estuvieron en el cementerio municipal el día 2, a lo largo del día, pero sobre todo, por la tarde.
Algunos entrevistados comentaron que este año el recinto conservaba una imagen más limpia, en comparación a otros años.
Por su parte, el encargado de despacho de Ajijic, Maximiano Macías Arceo, señaló que no hubo mayores inconvenientes, más que las grandes cantidades de basura que se limpiaron al día siguiente.
Obra “El último trago” que se presentó en Jocotepec por segundo año. Foto: Carlos Cuevas.
Armando Esquivel.- Jocotepec vivió un festival que cautivó a los presentes, se trata de “Al fin que para morir nacimos” realizado del 28 al 30 de octubre y que celebró su segunda edición para conmemorar el Día de Muertos.
“Nos fue excelentemente bien, tuvimos, yo creo dos o tres veces más gente que el año pasado, obviamente tuvimos una producción mucho más grande, la gente ya el año pasado nos apoyó, pero este año nos apoyó más porque vio los resultados del año pasado”, dijo en entrevista el coordinador general, Carlos Alberto Cuevas Ibarra, quien agradeció el apoyo de la gente del barrio.
El festival alusivo al 2 de noviembre se realizó en la calle Morelos, entre Independencia y López Rayón, en el barrio conocido como “La Campana”. El viernes, primer día del festival, se convirtió en una noche músical con la presencia de la Orquesta de Cámara de la Universidad Autónoma de Guadalajara, que hizo que sonarán melodías como “La Llorona” y que sólo cobraron el transporte.
El segundo día fue el más concurrido, fecha en la que se contó con la presentación del colectivo “Peregrina”, integrado por estudiantes de la Licenciatura en Artes de la Universidad de Guadalajara (UdeG), quienes mostraron la puesta en escena “El muerto al pozo y del caribe al golfo”, que incluyó una intérprete para personas sordas.
Para el último día y cerrar con broche de oro, los asistentes pudieron presenciar “El último trago”, músical que se presentó por segunda ocasión, ganándose el aplauso y el cariño de las personas.
“Eso fue lo único que sí nos pidieron del año pasado, nos dijeron, por favor tienen que traer la obra de teatro, nosotros la vimos el año pasado y yo quiero que mi esposo la vea, que mi hija la vea, gustó bastante, es una obra de teatro que los mismos actores y esa compañía la escribieron, es muy mexicana y se disfruta bastante”, comentó el coordinador, quien dijo recibió mensajes para apoyar y que el siguiente año se vuelva a presentar.
El último día también se realizó una presentación de danza con fuego, así como la participación de la cantante “Lola la Tequilera”.
El festival de Día de Muertos es realizado por los vecinos de la zona, artistas y personas involucradas en las tradiciones culturales en el municipio. Y aunque apenas concluyó la segunda edición, se está pensando en la tercera.
“Todavía no se terminaba el último día, cuando ya tanto los vecinos, como parte de la organización, los mismos artistas, los mismos maestros que nos ayudaron preguntaron, ¿Qué viene para el próximo año? Y hay que renovar porque hay que traer cosas nuevas pensadas para la gente de Jocotepec”, adelantó Carlos Cuevas.
© 2016. Todos los derechos reservados. Semanario de la Ribera de Chapala