Organizadores, colaboradores y participantes del Festival Usos y Costumbres del Rebozo en el 2022. Foto: Sofía Medeles.
Sofía Medeles.- Resaltar las tradiciones de Ajijic, será lo que mostrará el “Festival de Usos y Costumbres del Rebozo” para este año, según comentó Erika Navarro, una de las organizadoras del festival a realizarse el 10 de septiembre.
Serán siete pasarelas, en las que mostrarán las tradiciones que tiene el pueblo mágico a lo largo del año, las cuales son: en enero, la fiesta patronal de San Sebastián; en febrero, el Carnaval; durante mayo, el día de la Cruz; en septiembre las festividades patrias; en octubre las celebraciones a la Virgen del Rosario; en noviembre el día de muertos y en diciembre el día de la Virgen de Guadalupe, así como las Posadas Navideñas.
“Se realzarán las tradiciones del pueblo, y se hará resaltar a la mujer que porte el rebozo”, mencionó Erika sobre el festejo. El festival se podrá disfrutar en la plaza principal de Ajijic, a partir de las 18:00 horas.
El programa del evento prevé el sorteo para elegir a la Reina del Rebozo, para luego realizar la pasarela de rebozos especiales con su respectiva explicación, donde participarán la Reina Fiestas Patrias Ajijic 2023 y sus princesas. Posteriormente se presentará la Orquesta Típica de Chapala y para cerrar, un mariachi engalanará la noche.
El Comité Organizador Fiestas Patrias Ajijic (COFPA) y la delegación de Ajijic son quienes apoyarán con el sonido, corona para la Reina del Rebozo y las presentaciones musicales que acompañarán el evento.
Quien desee participar podrá hacerlo presentándose con vestimenta tradicional, como vestidos y faldas, además de un rebozo. Los participantes podrán entrar al sorteo para elegir a la Reina del Rebozo.
El apoyo para la coordinación de la pasarela se realiza por Patricia Arceo; el Centro de Estudios Tecnológicos en Aguas Continentales (CETAC) plantel Ajijic; Ana Yañez y Amparo Robledo, quien está al frente del evento, así como Diego Garnica; Telares los Reyes; Cristina Mariscal; Andrea Blas; Jóvenes Guadalupanos y Lorena Gómez.
Por las noches, esta alma en pena sale a recorrer el camino. Su capillita colinda con el Panteón Municipal y es poco visitada.
Miguel Cerna.- Existen caminos en nuestro pueblo que se vuelven intransitables al caer la noche, y no porque exista una barrera física, sino más bien sobrenatural; con la oscuridad, criaturas que ya no son de este mundo, se manifiestan para buscar consuelo.
Es el caso de la calle del Ánima Sola, ubicada en la barda norte del Cementerio Municipal, y que en la época colonial sirvió de Camino Real para el transporte de mercancía y viajeros. Hasta la actualidad, la soledad sigue imperando por la falta de habitantes en esta ruta bordeada por frondosos y sombríos árboles.
En un pequeño y frío cuartito, adornado con flores empolvadas y velas extinguidas, reposa el Ánima Sola o Ánima Desesperada, imagen católica con la que se representa un alma en el purgatorio, que por los días es testigo del tránsito de los vivos; mientras que por las noches es ella quien recorre el camino en busca de consuelo o compañía.
Son pocos los jocotepenses que se animan a recorrer esta calle por las noches, sea por ignorancia o por valentía, pues siempre existe el riesgo de toparse con esta ánima solitaria. Según el testimonio de quienes la han visto, y que nunca han vuelto a cruzar por ahí, este espectro se manifiesta como una mujer vestida de blanco, cuyo vestido se funde con la palidez de su piel, dándole una apariencia transparente.
Cabizbaja, recorre el Anima Sola su calle apenas iluminada por las llamas de las veladoras que de vez en cuando algunos buenos cristianos llevan a su altar para ayudarla a llegar a su destino, acompañadas siempre de la oración que dice “ánimas benditas, que en el purgatorio estan, que de penas pasarán qué de tormentos tan crueles…”.
*Con información proporcionada por Diana Machuca, encargada del Archivo Municipal y coautora de la investigación titulada: “Entre Tumbas y Leyendas de Jocotepec”.
Juan, Enrique y Marcelo descansan en la parte antigua del panteón de Jocotepec.
Miguel Cerna.- Los relatos de ultratumba, apariciones misteriosas y hazañas inexplicables, forman parte de la identidad de casi todos nuestros pueblos, incluso con historias similares. No es la excepción de Jocotepec, en donde se cuentan numerosos mitos y leyendas que han sobrevivido gracias a la tradición oral.
En esta primera entrega, presentamos la historia de los hermanos Sánchez de León, a quienes la avaricia condenó a la muerte y cuyos restos, se cree, descansan en el cementerio municipal que data del año 1860.
Cuenta la leyenda que los tres hermanos eran hijos de doña Jacoba de León, quien vivía por la calle Morelos oriente a un lado de la casa de don Cándido Pérez; mientras que del padre solo se conocía el apellido “Sánchez”, por lo que respondían a los nombres de Enrique, Marcelo y Juan Sánchez de León.
Los tres hombres encontraron una fuerte cantidad de dinero en relucientes monedas de oro, pero más que una fortuna que les asegurara una vida cómoda y de placer, pasaba sobre ella una maldición dada la manera en que se hizo con ella quien la escondió.
La sentencia era clara: quien llegara a hacer uso de las monedas de oro, sufriría como castigo la muerte repentina e inevitable de tres miembros de su familia. Sin embargo, ofuscados por la necesidad de saberse ricos con tal fortuna a su disposición, los hermanos Sánchez de León desestimaron la maldición.
Meses más tarde, esa fuerza fatal reclamó a cada uno de los jóvenes, cuya suerte en la vida recién había cambiado. El primero en fallecer fue Juan Sánchez de 32 años, a quien un 14 de agosto el Lago de Chapala le arrancó su último suspiro.
Enrique, fue comisionado para reconocer el cuerpo inerte de su hermano Juan y por ende, en seguirlo a la sepultura. Con tan solo 27 años y siete de diferencia, este joven falleció un 14 de marzo de 1929, al parecer en las mismas condiciones, es decir, en las aguas de la laguna.
Finalmente, Marcelino Sánchez de León escapó solamente seis meses de su cruel destino al que la avaricia lo condenó, murió en el mes de septiembre de ese mismo año, pero esta vez no en manos de la naturaleza, sino del hombre: por una herida de arma de fuego.
Poco pudieron los tres hermanos disfrutar del oro encontrado, pues con su vida tuvieron que pagar el verse tentados por el anhelo del poder. Juan, Enrique y Marcelino Sánchez descansan en la parte antigua del Panteón Municipal, en donde hasta nuestros días, se habla de su presencia en este mundo al que ya no pertenecen.
Hasta la fecha, pocas son las almas que se atreven a pasar por este callejón a altas horas de la noche por el miedo de toparse con el jinete misterioso. Aún en la muerte, Toscano siguió asaltando los caminos de la región.
Miguel Cerna.- En la vida o en la muerte, el temible bandolero de la región de la Ciénega de Chapala, Martín Toscano (1754-1803), hizo de las suyas en muchos de los municipios aledaños al lago; Jocotepec no fue la excepción.
Esta leyenda da cuenta de un encuentro de ultratumba, de un joven enamorado con Toscano en uno de los caminos más antiguos y tenebrosos del pueblo: la calle del Ánima Sola, que en la época de la colonia fue usada como camino real por donde se transportaban las mercancías.
Fue una noche de 1935, entre la oscuridad y los murmullos que se apoderan de este callejón. Un muchacho de la cabecera regresaba de visitar a su amada, que vivía en Zapotitán de Hidalgo, como en cuestiones del amor las horas vuelan, lo alcanzó la penumbra de la madrugada.
A lo lejos, con el claro de la luna, este joven distinguió la silueta de un jinete que lentamente se dirigía a Jocotepec. Cuando menos lo pensó, ya había emparejado su marcha con la del hombre misterioso.
Vestido elegantemente de negro de pies a cabeza y montado en un caballo igualmente negro, este hombre, cuya cara era indescifrable, saludó al joven enamorado, mismo que correspondió con amabilidad dispuesto a entablar una conversión para regresar con compañía; sin esperar jamás lo que le pasaría.
Justo antes de llegar al panteón, el hombre misterioso le pidió un cigarro, mismo que el joven le entregó presurosamente.
En seguida, el joven sacó una caja de cerillos del bolsillo de su camisa. Al encender uno y acercarlo a la boca de su nuevo acompañante nocturno, la poca luz que lo iluminó, borró su aspecto de hombre y ante su mirada, apareció una criatura infernal con los ojos de fuego.
Tal fue el susto del jovencito que al ver a semejante espectro, cayó desmayado de su caballo, perdiendo el conocimiento hasta que fue encontrado al amanecer tirado en el camino. Aunque al inicio los que lo ayudaron lo tacharon de borracho, al contarles su encuentro de ultratumba con un jinete, todos quedaron impactados.
Fue así, a la mala, como este pobre joven acató la advertencia de Martín Toscano de no pasar por el Ánima Sola a altas horas de la noche, tal fue su miedo de volverlo a encontrar que jamás regresó a visitar a su amada.
*Con información proporcionada por Diana Machuca, encargada del Archivo Municipal y coautora de la investigación titulada “Entre Tumbas y Leyendas de Jocotepec”.
Miguel Cerna.- Con un festival nunca antes visto en la región, que incluye un altar monumental en el quiosco, un recorrido con más de 100 personas caracterizas como catrinas y catrines y una visita al cementerio, se conmemorará el Día de Muertos -del 1 al 3 de noviembre- en la localidad de San Juan Cosalá, municipio de Jocotepec.
Como principal atractivo, se decorará el quisco de la plaza con 6 mil 832 flores de papel, 4 mil 480 de cempasúchil natural, siete calaveras en gran formato, un tapete de aserrín y más de 600 veladoras; así como un túnel de 20 metros decorado con más de 5 mil 700 flores -entre naturales y de papel-.
Con la visión de proporcionar una experiencia única que llame la atención de locales, extranjeros y pueblos vecinos, es como se proyectó el festival impulsado por diversas agrupaciones civiles, con el objetivo de promover las tradiciones y la participación de la sociedad.
“En alguna reunión comentábamos, ‘pues está muy fuerte Halloween’, pero no vamos a hacer cosas que bloqueen esa tradición… no, mejor vamos fortaleciendo lo de nosotros y que más que disfrazarte de bruja o de zombi, sea más atractivo hacerlo el día de muertos”, comentó José Luis Guzmán Zamora, uno de los organizadores.
El 1 de noviembre, comenzarán las actividades con una caravana de canoas decoradas por el margen del lago a lo largo del malecón; posteriormente, a las 20:00 horas, se iniciará con el “Paseo de las Ánimas” que espera la participación de más de 100 personas caracterizadas de catrinas y catrines, quienes saldrán rumbo al panteón para ofrendar con música, poesía y el canto del alabado a los difuntos que ahí descansan, tradición que se cree, evita que el demonio se apodere del alma de los fallecidos.
Los organizadores invitaron a los asistentes a participar llevando flores naturales, veladoras o fruta para obsequiar a los muertos, además de caracterizarse acorde al festejo, para lo que -a partir de las 18:00 horas- habrá una veintena de personas pintando las caras de los asistentes en la explanada de la Delegación.
Para el día 2, a las 20:00 horas, se llevará a cabo un desfile por la ruta de costumbre en la población, con la participación de las candidatas del “Top Model”, previo a la realización del certamen, que será amenizado por el Ballet Folclórico de San Juan Cosalá “Son de México”. Para el 3 de noviembre, solo permanecerá la ofrenda monumental que se instalará en el quiosco.
También, se instalará un corredor gastronómico a un costado de la plaza, en donde se podrá degustar la comida típica de la localidad, como el pan tachihual y los tamales de frijol; así también habrá diversas presentaciones de música regional.
Fue gracias a la unión de múltiples agrupaciones sociales -convocadas por Agustín Vázquez Calvario del restaurante “Viva México”- que se logró aterrizar una conmemoración diferente, pues anteriormente los encargados de los festejos eran el colectivo “Pata de Puerco” y “Top Model”; sin embargo, este año se sumaron a la iniciativa el Ballet Son de México, el colectivo “Colores que dan vida”, la asociación ProMéxico, el DIF de Jocotepec y algunas instituciones educativas.
Para más información sobre las actividades del festival, visitar la página de Facebook Día De Muertos 2019 San Juan Cosalá.
Miguel Cerna. – El rostro del Señor del Monte será la imagen que adornará el programa de actividades de las celebraciones en su honor durante el mes de enero, mismas que culminarán el día 19.
El diseño elegido por los cargueros del Cristo, en compañía del señor cura Jesús Quiroz Romo, sale de lo acostumbrado para la edición 2020, pues será la primera vez que se realizará una focalización de su rostro y no aparecerá de cuerpo completo frente a un paisaje, como se representaba comúnmente.
“A mí en lo particular me gustó mucho; sí es cierto lo que algunos dicen, uno está acostumbrado a ver la imagen completa, pero creo que viendo el puro rostro se le notan rasgos que yo no había notado. Nos convenció la mirada que se le percibe, una mirada amorosa, abierta y por eso es que nos gustó mucho”, declaró Quiroz Romo.
En la reunión en la que se eligió la décima, celebrada en la Casa Pastoral de la Parroquia del Señor del Monte -el pasado 8 de octubre-, hubo quienes se dijeron disgustados con la fotografía elegida temiendo la no aceptación de la población, como sucedió el año pasado con la imagen antigua del Cristo que “hubo un rechazo de los mil diablos”, según apuntó uno de los cargueros.
Dada la inquietud de algunos de los miembros del grupo organizador, se decidió que, para las fiestas del 2021, se pondrá a concurso el diseño de la décima con el objetivo de refrescar las propuestas que representarán la festividad -que tiene 185 años ininterrumpidos-.
Se espera que la distribución del programa de actividades de las Fiestas en Honor al Señor del Monte inicie a finales de octubre, comenzando con la comunidad de jocotepenses radicados en Estados Unidos.
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