“La inspiración es Ajijic y es una responsabilidad ser el pueblo que inspira y también un privilegio”, afirmó Lalo Ramos
El tesorero de Pasión de Cristo Ricardo Mora y el coordinador general Eduardo Ramos Cordero.
Arturo Ortega.- A lo largo de 39 años, la puesta en escena de Pasión de Cristo se ha convertido una tradición que ha significado un encuentro social entre los habitantes de la delegación que año con año participan y apoyan en su realización, además de un referente para los poblados circunvecinos, quienes de alguna manera adoptaron elementos para llevar a cabo sus propias representaciones.
Al respecto, el iniciador de Pasión de Cristo Ajijic, Lalo Ramos, comenta rumbo a los 40 años de la obra que “[…] Me ha dejado la satisfacción de poder servir al pueblo y dar un poquito de lo que nos han dado”, no con dinero, pero sí en especie a través de la Jamaica del Pasado, una kermese que intenta emular la forma en que se hacían a principios del siglo XX y cuyos ingresos son para sustentar la realización de la obra. Este año se realizará el 14 de abril de 4:00 de la tarde a 11:00 de la noche en la plaza principal.
Y precisamente es la cuestión de los ingresos donde no todo es miel sobre hojuelas, pues Ricardo Mora, quien es tesorero del grupo y participa desde hace siete años, comenta que sacar adelante Pasión de Cristo Ajijic cuesta 150 mil pesos en insumos, considerando que los 100 personajes que necesita el montaje, así como la mano de obra para trabajos de escenografía, logística, organizar kermeses y subastas de arte, es totalmente voluntario.
Ricardo, quien perdió un familiar querido y no pudo acudir a su sepulcro la mañana de Viernes Santo del 2018 por sacar adelante la obra, comentó que a lo largo de estos años lo que Pasión de Cristo le ha dejado es conocer a mucha gente y la generosidad de las personas más humildes de la población quienes aportan en ocasiones dan lo que necesitan para comer.
Respecto a las interpretaciones que se realizan en otras poblaciones Lalo comenta que es algo bueno, pues cada pueblo se expresa en lo religioso de manera diferente. “La inspiración es Ajijic y es una responsabilidad ser el pueblo que inspira y también un privilegio”, afirma Lalo, quien asegura que ha habido acercamiento por parte de San Juan Cosalá del municipio de Jocotepec, San Antonio, Riberas del Pilar e incluso Chapala.
Con el tiempo, tanto Lalo como Ricardo consideran que no han ganado enemigos sino más amistades, al asegurar que se llevan bien con los realizadores de la Pasión de las poblaciones vecinas.
Por otra parte, dentro del grupo se han generado grandes amistades e incluso se han formado familias como la de Ubaldo Gutiérrez y Nereida quienes se conocieron dentro del grupo y después se casaron, entre otras parejas que Lalo, de momento no recuerda.
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