La concentración de sustancias toxicas para el ser humano se vierten al lago desde el antiguo basurero de Ixtlahuacán
Cortina que conduce el agua de la presa de San Nicolás hasta el Lago de Chapala. Foto: Manuel Jacobo.
Manuel Jacobo (Chapala, Jal).- Pese a que el basurero antiguo de Ixtlahuacán de los Membrillos se encuentra clausurado, no se ha dejado de tirar basura en él, por lo que en su parte baja se siguen generando residuos tóxicos conocidos como lixiviados que terminan en la presa de San Nicolás y el lago de Chapala.
Aunque desde hace tiempo se colocó un muro para evitar que los lixiviados terminen en el arroyo que se ubica a unos 70 metros del cerro donde está el antiguo basurero, esto no lo ha impedido, pues el agua en tiempos de lluvias se escurre sobre el cauce y una parte se une a un canal de riego, sin dejar de fluir sobre el arroyo que pasa por diversas parcelas hasta llegar a la presa de San Nicolás.
De la presa, el cauce sigue por una cortina que conduce hasta el Lago de Chapala, lugar donde culmina el agua ya contaminada, según constató en una visita al lugar Semanario Laguna.
Al igual, el ganado que se produce en la zona bebe agua de la presa, además de que algunos campesinos toman agua ocasionalmente de ahí para sus parcelas.
Investigaciones y la ausencia de las autoridades
José Antonio Flores Plascencia es un ingeniero que se ha dedicado a investigar sobre el tema de lixiviados en distintos lugares; sin embargo, en el basurero antiguo de Ixtlahuacán realizó su primer muestreo en 2009, en el que encontró altas concentraciones de residuos provenientes del depósito de basura.
Antonio, como es conocido, señala que una parte de la contaminación se mide como materia orgánica. La materia orgánica, en términos ambientales, se calcula como Demanda Bioquímica de Oxígeno (DBO), lo que sirve para identificar el grado de contaminantes con las que ésta cuenta.
Para ejemplificar el caso de los lixiviados que se generan en dicho basurero, el investigador y maestro del Centro de Estudios Tecnológicos en agua Continentales (CETAC), menciona que una planta de tratamiento de aguas residuales como la de Chapala recibe agua con 200 miligramos por litro de DBO, mientras que los residuos que el basurero genera son 15 veces superiores; es decir con 3 mil miligramos (es decir, tres gramos) por litro.
Además, agrega que el Lago de Chapala es un cuerpo de agua conocido como tipo “C”, lo que significa que toda agua que se vierte sobre él no debe superar los 10 miligramos por litro de DBO, cosa que no ocurre debido a que los escurrimientos del basurero se exceden.
Los registros que tiene el investigador sobre el basurero avalan la presencia de lixiviados, pero también la ausencia de las autoridades para evitar que los residuos lleguen al lago mediante el cauce o los mantos acuíferos debido a que este tipo de basureros no cuentan con membranas que protejan al subsuelo tal como lo marca la Norma Oficial Mexicana NOM-083-SEMARNAT-2003.
Cabe señalar que en 2004 dicho basurero se vio envuelto en una controversia debido a que fueron descubiertos 10 camiones de 30 metros cúbicos que portaban desechos médicos. Pese a que estos requieren de una disposición final distinta por tratarse de desechos biológico-infecciosos, fueron depositados en el vertedero.
Actualmente, las autoridades de Ixtlahuacán se hacen de la vista gorda y no han implementado acciones. Por otra parte, el ayuntamiento de Chapala dice tener conocimiento de la problemática, pero señalan que es un problema que se viene arrastrando.
El director de Ecología del municipio de Chapala, Alfredo Gutiérrez, manifestó haber reportado la presencia de lixiviados ante la SEMADET, sin embargo, aceptó que no se han implementado acciones.
El director de Protección Civil y Bomberos, Enrique Perales, dijo haber realizado una inspección en la que encontraron que sí hay presencia de los residuos y que estos están llegando hasta el Lago de Chapala.
Basureros rebasados en distintos municipios
El problema de los basureros no es único de Ixtlahuacán de los Membrillos, pues Jocotepec es un ejemplo de los problemas que enfrenta la región con relación a la disposición final de basura y su tratamiento adecuado.
El director de Asociación Intermunicipal para la Protección del Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable del Lago de Chapala (AIPROMADES), Gabriel Vázquez Sánchez, informó que de los 16 municipios que integran la asociación, 12 cuentan con basureros municipales. De éstos, “algunos con altas concentraciones a punto de ser rebasados o algunos fuera de su utilidad pública”, apuntó el funcionario.
Vázquez Sánchez, apunta a un reordenamiento en el manejo de residuos en los 16 municipios que afectan a unas 600 mil personas.
Hasta el momento no se tienen datos exactos de cuantos basureros están produciendo lixiviados tal como lo está haciendo el basurero de Ixtlahuacán, sin embargo, en diversas instituciones se sabe que existe un problema ambiental y que no se puede festejar el 05 de junio como el Día internacional del Medio Ambiente.
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