Pese a que se busca el nombramiento como pueblo mágico, el Andador Cultural Axixic ha propiciado, irónicamente, el aumento del comercio informal en la población, afectando no sólo el posible futuro nombramiento, sino también la economía local
El proyecto que inició con la idea de crear un espacio gastronómico cultural en una calle libre de vehículos, irónicamente, ahora resulta casi imposible transitar sin que se tengan que sortear no sólo mesas, sino que más de una decena de comerciantes ambulantes. Foto: Laguna.
Domingo Márquez.- El incremento de vendedores ambulantes en el Andador Cultural Axixic y la nula presencia de actividades culturales han dado al traste con el polémico proyecto de cerrar la calle Morelos los fines de semana para poner a la venta comida, bebida, arte, y un espacio para que el turista caminara libre del automóvil.
Irónicamente, debido a la presencia del comercio ambulante los fines de semana, esta calle se ha “convertido en un espacio caótico e inseguro, no congruente con la imagen de lugar tranquilo y amable que tiene Ajijic por tradición”, denunciaron los comerciantes establecidos en una carta con más de 40 firmas entregada a las autoridades municipales el 16 de octubre del 2017, con la finalidad de buscar una solución al problema del ambulantaje.
La mercancía que vende la docena de comerciantes apostados a lo largo y ancho del Andador los fines de semana es de una calidad muy por debajo a la ofertada en las boutiques, galerías y tientas de artesanías establecidas en la céntrica calle Morelos, donde dichos comercios ya reportan hasta un 80 por ciento de pérdidas de ventas en el caso de joyerías y hasta un 10 por ciento en galerías y tiendas de artesanía. Denunciaron los comerciantes ante medios de comunicación.
El descuido de la imagen del Andador Axixic ha sido tal que, según los comerciantes establecidos, no saben a ciencia cierta cuál de las dependencias municipales es la encargada de administrar dicho espacio, mucho menos de lo que se está haciendo con el dinero que cada fin de semana se cobra por el permiso de venta de ambulantaje.
Para dar más color al lugar, los enfrentamientos entre locatarios y ambulantes por la defensa del espacio cada vez son más frecuentes, ya que los dueños de los comercios se quejan de que los ambulantes obstruyen con su mercancía la entrada a sus negocios. Ahora ya no es de extrañar el ser testigo de un “agarre” entre un ambulante y un comerciante establecido.
Timoteo Aldana, propietario del hotel La Estancia, denunció acoso por parte de los ambulantes que se apostan con su mercancía afuera de su negocio obstruyendo la entrada a los clientes, quienes se quejan de lo imposible que es transitar por el Andador Axixic los fines de semana.
“[El comercio ambulante] le ha cambiado el segmento del mercado, ha abaratado la imagen de Ajijic, y ha mermado las ventas de los negocios establecidos” (sic), manifestó ante los medios de comunicación Armando Toledo, propietario de un café y exadministrador del Andador.
Armando explicó a Laguna que desde hace más de un año surgió la propuesta de que comerciantes establecidos sacaran sus mesas o mercancías los fines de semana a vender a la calle, cerrarla al tráfico vehicular e invitar artistas y artesanos locales, pero a partir de que la administración fuera tomada al parecer por las autoridades gubernamentales, el proyecto turístico y cultural se ha convertido en un tianguis sin oferta cultural y gastronómica. “Ya no es un Andador, es venta de comercio informal”, sentenció el entrevistado.
Las quejas no solo son de los comerciantes establecidos, sino también de los clientes que visitan el lugar. “Fui a sentarme al andador y me tomé una bebida y fueron al menos seis vendedores que interrumpieron mi plática para ofrecerme sus mercancías” (sic), manifestó un local, quien tuvo la oportunidad de visitar el Andador semanas atrás y no se llevó la mejor impresión.
Desde la apertura del Andador (hace poco más de un año) se creó controversia por el cierre de la calle Morelos, pues es la calle que comunica directamente al muelle del malecón, pese a las inconformidades de algunos locales se decidió dar luz verde al proyecto que prometía mejorar el turismo, la imagen del pueblo, además de ofertas laborales a los locales. Todo quedó en discurso.
Pese a que Ajijic aspira al nombramiento de Pueblo Mágico, el comercio ambulante en la población sigue creciendo y parece que ha pocos les interesa detenerlo, pues muchos de los ambulantes que venden en el Andador Axixic tienen puestos en otros puntos de la delegación como el Callejón del Arte y la Cultura (a un costado de la plaza principal), lugar que también en un principio fue creado para que artistas y artesanos que no tuvieran negocio o galería ofertaran sus creaciones. El espacio, al igual que el Andador, terminó en manos de artesanos, en su mayoría, revendedores.
Ante los medios de comunicación, los comerciantes establecidos hicieron una extensa invitación a verdaderos artistas a que muestren sus creaciones y así evitar a los tianguistas en el lugar. La calle Morelos se cierra los sábados de 2:00 a 9.00pm y los domingos de 12:00 a 10:00pm para dar paso al Andador Cultural Axixic, que de Andador tiene poco y de propuestas culturales menos que eso.
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