CHAPALA, LA CONAGUA Y LA CEA.
Por: B. Manuel Villagómez R.
Sí al Lago de Chapala.
El viejo refrán dice: “San Isidro Labrador, pon el agua y quita el sol”, y la naturaleza anualmente lo cumple tocándonos a los humanos a cuidar el agua de las lluvias.
Para el caso de Chapala, tenemos desde hace 26 meses el decreto que publicó el Presidente Peña Nieto que regula los escurrimientos de la Cuenca Lerma Chapala para que a cada uno de los 19 distritos, la CNA le entregue el agua que le corresponde de acuerdo a los escurrimientos, tomando como base el nivel del Lago.
El decreto no se aplicó en 2014 ni en 2015, porque fueron dos años de burla para Chapala, pues mientras las presas del alto y medio Lerma quedaron en promedio arriba de su capacidad, Chapala quedó al 50% de su capacidad. Ahora, en este tercer año de vida del decreto, desde aquí exigimos a Jorge Malagón Díaz, director del Organismo de Cuenca Lerma Santiago Pacífico, y al ingeniero Felipe Tito Lugo Arias, director de la CEA, que vigilen el cumplimiento de este decreto, porque nos garantiza los 240 millones de metros cúbicos para consumo humano a los habitantes de Guadalajara.
Por cierto, desde esta columna hemos propuesto que esta cantidad de agua la negociemos con León para que acepten 120 millones de metros cúbicos del río Lerma, a cambio de que nos quedemos con los 120 a los que tiene derecho León del Zapotillo, pero en este punto, las autoridades, incluyendo Jalisco, están empantanadas al mirar sólo el interés de Guanajuato.
Así se demuestra al aplicar el decreto de manera parcial, privilegiando el llenado de las presas antes que el Lago de Chapala, el cual de sus propios escurrimientos. Esta política, que está demostrada, no es suficiente para mantener al Lago en su nivel ecológico, que debe de almacenar 5,800 millones de metros cúbicos, nivel que se puede lograr si aplicamos el plan maestro que prevé la tecnificación del riego agrícola en toda la cuenca, con lo que ahorraríamos 400 millones de metros cúbicos al año, y que serían para alargar la vida ecológica del Lago.
Si actuamos de esta manera, el Lago puede llegar a su cuota óptima que es de 7,900 millones de metros cúbicos con un sistema de auténtica recuperación de por vida. De ahí la importancia que tiene exigir a la CONAGUA y a la CEA de Jalisco que cumplan con lo que expresa el decreto. En este caso, es a Felipe Tito Lugo a nombre de Jalisco, a quien le corresponde dar la pelea para que en este temporal de lluvias ya se cumpla este decreto.
En las reuniones de la cuenca, el secretario técnico es juez y parte; actúa con ventaja, pero Tito Lugo tiene 36 años de experiencia; conoce las artimañas y a los actores de estas reuniones de antes y después del decreto.
Ha sido gerente de la CONAGUA en esta cuenca y está preparado, por ello, le recordamos su responsabilidad para con el Lago de Chapala en este temporal de lluvias que ya se inició, y que sabe perfectamente bien los niveles que tienen la presa de Solís y la Laguna de Yuriria. Con esas referencias, debe de estar pendiente de que se le haga justicia al Lago de Chapala y también, cuidar el desvío del agua de la presa del Mezquite, presa de la cual se envía el agua para Michoacàn.
Los comentarios están cerrados.
© 2016. Todos los derechos reservados. Semanario de la Ribera de Chapala