Hemos formado 30 generaciones de alumnos
Los primeros años fueron tiempos difíciles hubo una generación donde solamente ingresaron 16 alumnos y egresaron 2 por cada área
Maestros del Cetac que se jubilan de izquierda a derecha: Jaime Galván Echavarría, Juan Manuel García Rodríguez, Sergio Ortega García, los acompaña Rubén Quiñones y Juan José Paniagua Murillo. Pulsa en la imagen para ver la fotografia completa.
José Antonio Flores Plascencia (Jocotepec, Jal. 14/10/2016).- Era un lunes 17 de septiembre de 1984 cuando conocí a los maestros del Cetac de Jocotepec, Jaime Galván Echavarría (Cerro Azul, Veracruz) y Sergio Ortega García (México, D.F.). En ese tiempo se impartían clases en el edificio de la Preparatoria. Fueron mis maestros de química, bioquímica, biología y métodos de instrumentación y análisis. Al poco tiempo llegaron Juan José Paniagua Murillo (Tepic, Nayarit) y Juan Manuel García Rodríguez (Sayulita, Nayarit). Fueron ellos y otros más que cimentaron una oferta educativa que enaltece a la región.
El viernes pasado anunciaron que nos querían a todos en el patio central de la escuela. Conviví con ellos ya como profesor de esa institución por siete años. El evento era para dar un reconocimiento y despedir a los cuatro maestros que por 33 y 30 años educaron a una parte de la región sur y norte del lago de Chapala. La ceremonia se inició a las 10 de la mañana con la presencia del alumnado y personal que ahí laboramos, tomaron el micrófono cada uno de ellos, Sergio Ortega se dirigió a los alumnos y les dijo que “Es un orgullo pertenecer a esta gran institución y no cualquiera se jacta de ello”. Entre aplausos, porras y de fondo la canción de las golondrinas se despidieron a estos cuatro personajes que han escrito su nombre en muchas de las casas de nuestras poblaciones.
Ya en el cubículo con ellos me platicaron que en ese 1984 en el periodo de vacaciones visitaron cada una de las poblaciones de Jocotepec, Ixtlahuacán, Tuxcueca y Chapala haciendo promoción. Se inició con 160 alumnos distribuidos en las carreras de Técnico en Control de la Contaminación Acuática, Procesamiento de Productos Pesqueros y Acuacultura, aunque uno de los principales obstáculos que se encontraron fue la poca aceptación de la comunidad, pero dijeron que unas de las primeras familias que les abrieron las puertas en Jocotepec fueron los Macías Ibarra y los Pirul Xilonzochitl.
En esos primeros años fueron tiempos difíciles. Hubo una generación donde ingresaron 16 alumnos y solamente egresaron 2 por cada área. A dicha generación le pusieron la 222.
Jaime Galván comentó que una de sus grandes satisfacciones “Es haber completado un ciclo satisfecho con lo que hice”.
Para Sergio Ortega también una de sus satisfacciones fue “que hemos participado en la educación de los hijos de nuestros primeros alumnos. Eso me genera confianza es una señal de que hicimos bien las cosas. La primer egresada hija de un alumno que aquí finalizó sus estudios fue Nadia Andrea Flores Espíritu de Ajijic”. Continuó diciendo que “Una vez en el aeropuerto de Cancún escuchó su nombre ‘Maestro Sergio’, era la voz de un exalumno”. Apuntó “hemos formado 30 generaciones de alumnos”.
Finalizaron diciendo que no nada más daban clases, sino que también ayudaron en la construcción de estanques, el pozo que actualmente es la fuente de abastecimiento del plantel, así como banquetas.
Sólo nos resta decirles gracias Sergio, Jaime, Paniagua y Juan Manuel; y tomar las palabras del cantante Alberto Cortés: “Cuando un amigo se va queda un tizón encendido que no se puede apagar ni con las aguas de un río”. Y seguro estoy que aquí cabe la frase que acuñó el educador Miguel Ángel Santos Guerra: “Si volviera elegir profesión elegiría ser está (maestro), es la más hermosa, la más compleja, la más difícil, la más importante que se le ha encomendado al ser humano en la historia, trabajar con la mente y el corazón de los jóvenes.
Evento en la escuela de los maestros que se jubilan del Cetac de izquierda a derecha: Juan Manuel García Rodríguez, Jaime Galván Echavarría, Juan José Paniagua Murillo y Sergio Ortega García.
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