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La queilitis angular, también llamada queilitis comisural, rágades angular o estomatitis de las comisuras, son los términos utilizados para denominar a lo que comúnmente se conoce como boqueras o perleche.
Las boqueras son fisuras que aparecen en la comisura de la boca. Estas, además de ser incómodas y molestas, forman úlceras; las cuales, aunque son superficiales hacen costras que se agrietan y sangran cuando se abre la boca.
La piel en esta área de la boca, al verse afectada por queilitis angular, puede generar dificultades para sonreír, hablar, comer y beber.
La queilitis comisural es el resultado de varios factores, como una infección micótica como la candidiasis oral, una deficiencia de vitamina B12, deficiencia nutricional de hierro, por relamerse los labios constantemente, chuparse el dedo y también se ha identificado en personas que utilizan dentaduras postizas mal ajustadas y que no las limpian frecuente y adecuadamente.
Esta infección comisural arde, da comezón, las comisuras presentan un color blanco amarillento y la piel se muestra inflamada, reseca, escamosa y con ampollas.
La queilitis angular puede aquejar a una persona a cualquier edad, pero se presenta con mayor incidencia en personas que tienen alguna deficiencia nutricional o aquellas que tienen un sistema inmunológico debilitado, ya sea por enfermedades como la diabetes o bien por síndromes como el de Down, el síndrome de Sjögren y el virus de la inmunodeficiencia humana.
Dependiendo del origen del perleche, el tratamiento consistirá desde cambios en la dieta, la toma de suplementos nutricionales o la toma de antibióticos.
El dentista, el médico general, el dermatólogo o el pediatra son los profesionales de la salud que determinarán si el problema es provocado por una infección por hongos, por alguna bacteria o debido a una patología subyacente.
Tenga en cuenta que las boqueras no se curan aplicando un simple bálsamo labial. Ya que el ambiente húmedo y la saliva sirven como el medio de cultivo ideal para muchos microorganismos, así que los medicamentos a considerar deberán ser a base de antimicóticos, antibióticos o corticosteroides.
Además, deberá abstenerse de fumar y pintarse los labios; deberá mantener una higiene bucal buena donde se cepille los dientes frecuente y adecuadamente. Una boca y una cara limpia y seca le ayudarán a combatir más rápido las infecciones comisurales.
Por lo general, la queilitis angular con tratamiento cede en unos cuantos días, pero si no se mantienen hábitos de higiene oral adecuados, puede reincidir. Así que siga las instrucciones del profesional y haga su parte en lo que corresponde a la higiene personal.
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La enfermedad autoinmune de la artritis reumatoidea es un tipo de inflamación que afecta a las articulaciones y los tejidos a su alrededor. El sistema inmune identifica erróneamente al tejido sano y lo ataca. La afección es de causa desconocida y puede presentarse a cualquier edad.
Se presume que la herencia, las hormonas y el tabaquismo juegan un papel importante para su desarrollo; y la enfermedad afecta alrededor del mundo a más mujeres que a hombres. La artritis reumatoide debe diferenciarse de la osteoartritis, en la cual la segunda es debido al desgaste de las articulaciones, pero como producto del envejecimiento.
La artritis reumatoide con frecuencia se presenta de manera bilateral, aunque existen casos en los que sólo una articulación es afectada. Con mayor frecuencia aparecen en la articulación de la cadera, los tobillos, los codos, los pies, las rodillas, las muñecas y los dedos de las manos y en algunos otros casos, también en la articulación temporomandibular.
Los síntomas de los reumas son de un avance lento y los primeros incluyen: un ligero dolor articular, rigidez articular sobre todo por las mañanas, cansancio, puede haber inflamación, entumecimiento, sensibilidad y una sensación de calor en las coyunturas afectadas; y conforme avanza el tiempo y la progresión de esta condición, las articulaciones pierden el rango del movimiento y eventualmente también aparecen nódulos y deformidades.
El tratamiento debe ser llevado por el médico especialista, en este caso un reumatólogo y el control a largo plazo incluye la toma de fármacos, cirugía y fisioterapia; además de la realización de ejercicio regularmente y el de adoptar una dieta nutritiva y balanceada; además de la abstinencia de los productos de tabaco y el alcohol.
Sin tratar, la artritis reumatoide puede ser aparte de dolorosa, bastante debilitante y frustrante; ya que el grado y la severidad de las deformaciones, por ejemplo, en las articulaciones de los dedos de las manos, puede dificultar tareas simples como el de abrochar botones, cierres, sostener una cuchara y amarrarse las agujetas.
Además, pueden existir complicaciones en otras partes del cuerpo, tales como daño pulmonar, lesiones en las vértebras y el cuello y varias enfermedades cardíacas.
Desafortunadamente hasta ahora, no existe una forma preventiva ante la artritis reumatoidea; sin embargo, ante la aparición de los primeros síntomas, es importante el diagnóstico y detección acertada, para que de forma oportuna se comience el tratamiento y así prevenir a futuro un mayor daño articular.
Así que, si ya tiene la dolencia, evite untarse ungüentos y preparaciones; primero confirme que el producto no hace interacción con lo que el reumatólogo le haya prescrito. Siempre tenga en cuenta que los productos naturales pueden interactuar indeseablemente con los medicamentos, resultando en una reacción no solo dañina si no peligrosa.
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La acumulación de ácido úrico en la sangre es lo que provoca una forma de artritis comúnmente conocida como gota. Este tipo de artritis causa inflamación en las articulaciones (coyunturas).
Cuando existe un exceso de la acumulación de ácido úrico en el líquido sinovial de las articulaciones, este se transforma de líquido a pequeños cristales; exacerbando la inflamación y provocando entonces dolor, hinchazón y calor (aumento de la temperatura) en el área afectada.
La causa exacta del padecimiento de la gota es desconocida, pero se sabe que es de una alta predisposición hereditaria. Afecta con mayor frecuencia a los varones, pero aparece también en mujeres mayores, en personas que consumen alcohol regularmente, personas obesas, aquellas con leucemia, anemia drepanocítica, enfermedad renal y diabetes.
Las articulaciones más afectadas y con mayor frecuencia son el tobillo, la rodilla y el dedo gordo del pie. Pueden afectarse solo una o ambas articulaciones y los síntomas son: dolor súbito e insoportable y que aumenta particularmente por la noche; la articulación al tacto se siente caliente, esta hinchada, roja y la piel es muy sensible incluso al roce de las sábanas. También puede haber fiebre y dificultad para conciliar el sueño por el dolor.
Loa ataques súbitos de gota, así como aparecen pueden desaparecer espontáneamente pero el alivio solo es por unos días o incluso varios meses, pero le aseguro que reaparecerá y cada episodio sucesivamente permanecerá más tiempo.
Algunos pacientes desarrollan artritis gotosa como resultado crónico de los ataques de gota sin tratar; al paso del tiempo las articulaciones afectadas desarrollarán daño irreversible articular, con limitación de movimiento y en los cuales los síntomas como el dolor aquejarán todo el tiempo.
También pueden desarrollarse tofos los cuales son protuberancias o bultos en la piel de las articulaciones como los codos, las orejas y la punta de los dedos, estas no solo tienen mal aspecto, sino que pueden supurar.
Como métodos de tratamiento para la gota se usan medicamentos como el ibuprofeno, la colchicina, la prednisona y la anakinra. El malestar ante un ataque de gota cede después de la toma de fármacos alrededor de 48 horas después.
Y para disminuir los niveles de ácido úrico en la sangre deberá, adicionalmente tratarse con medicamentos como el alopurinol, la probenecida y el febuxostat.
De igual manera será indispensable que haga modificaciones en su estilo de vida y dieta; tales como rehabilitación en caso de ser alcohólico, acudir a un nutriólogo para disminuir la obesidad y hacer ejercicio regularmente. No espere a tener las rodillas, las manos y los pies deformes, haga lo posible por dejar de tomar cerveza y cualquier forma de alcohol; no se confié porque solo ha tenido un ataque de gota una vez, nada le absuelve de que ocurra de nuevo. ¡Modere el consumo de carne roja y muévase!
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El liquen plano es un proceso crónico inflamatorio que afecta la boca. Se presenta como manchas blancas que aparecen en la mucosa oral con un patrón parecido al encaje; además de contener zonas de tejido rojo, inflamado y con llagas.
Las lesiones del liquen plano bucal no son contagiosas, pero provocan molestias incómodas que incluyen dolor y ardor. Estos síntomas pueden controlarse, pero requieren de un monitoreo constante y son de suma vigilancia ya que elevan el riesgo de transformarse en cáncer de las áreas afectadas.
El origen del liquen plano oral radica en una falla del sistema inmunitario, el cual no se reconoce así mismo y reacciona erróneamente como si se fuera una entidad foránea atacando las células de la mucosa oral y sin motivo aparente. Afecta con mayor frecuencia a mujeres que a los hombres, pero no significa que en los varones no se presente.
Las lesiones del liquen plano oral pueden aparecer en el interior de las mejillas, siendo esta zona la ubicación más frecuente, pero también puede presentarse en el paladar, la parte interna de los labios, la lengua y la encía.
Curiosamente, cuando las manchas reticuladas con forma de encaje se desarrollan en la parte interna de las mejillas, en ocasiones pueden o no presentar ningún síntoma; pero cuando las manchas están inflamadas, enrojecidas y contienen llagas, además de dolor y ardor pueden provocar sensibilidad al consumir alimentos condimentados, ácidos y picantes. El paciente también puede referir engrosamiento de la lengua, dificultad para lavarse los dientes, hablar, masticar y deglutir. Además de que al examen odontológico clínicamente puede observarse una gingivitis generalizada.
El liquen plano oral es llamado así por que es el que afecta la mucosa oral, sin embargo, las lesiones del liquen plano también pueden afectar otras partes del cuerpo como el esófago, los ojos, las uñas, el cuero cabelludo, las orejas, los genitales y la piel en general.
El padecimiento del liquen plano bucal no solo conlleva las dificultades que imposibilitan al paciente de no poder alimentarse bien; si no que existen otras complicaciones que se desarrollan como consecuencia de la enfermedad, las cuales incluyen la pérdida de peso, depresión, estrés, infecciones fúngicas, deficiencias nutricionales, cicatrices y cáncer oral.
El diagnóstico con frecuencia es realizado por el médico general o el dentista y es probable que también le realicen alguna biopsia, cultivos y análisis sanguíneos para descartar otras afecciones asociadas con los trastornos del sistema inmunitario.
Como forma de tratamiento las siguientes medidas incluyen medicamentos y métodos para reducir los síntomas y acelerar la cicatrización de las lesiones bucales como antihistamínicos, enjuagues bucales con anestésicos, corticosteroides orales, vitamina A y terapia de rayos ultravioleta.
El liquen plano bucal, puede desaparecer por sí solo; pero tiene periodos de mitigación y exacerbación, los cuales pueden durar años causando a la persona mucha incomodidad y frustración.
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El estrés y la fatiga que resultan del agotamiento laboral causan un estado crónico de extenuación emocional y física. Y a su vez se crean sentimientos desmoralizantes y un sentido de consumación personal. Todo esto es lo que se conoce formalmente como el síndrome de desgaste laboral o “burnout”, en inglés.
El desgaste profesional si no se identifica puede llegar a crear consecuencias severas en la salud física y mental. Y tiene varias causas, por ejemplo: un ambiente laboral tóxico, la monotonía de las tareas que se realizan o por el contrario caos y drama diario; un desequilibrio entre la vida personal y el trabajo; demandas en las actividades profesionales que exigen largas horas, muchas actividades y poca, si no es que una nula libertad fuera del horario de trabajo.
Los signos y síntomas más comunes causados por el desgaste profesional son: estrés excesivo, insomnio, cansancio, tristeza, irritabilidad, alcoholismo, hipertensión, diabetes y enfermedades del corazón.
Para la mala suerte de casi todos, se debe trabajar; ya que, sin una entrada económica, no se puede gastar y si no se gasta no se pueden adquirir productos ni de canasta básica y ni obtener servicios como el del alquiler de una vivienda por muy modesta que esta sea.
Así que es indispensable y en ocasiones hasta si no se cuenta con recursos, autoayudarse para poder aprender a manejar el agotamiento laboral.
Las siguientes medidas sugieren un poco de ayuda en el cual, para iniciar, se debe identificar qué opciones se tienen dentro del trabajo o bien que es lo que se puede conseguir en otro campo profesional.
Busque expresar sus preocupaciones con el departamento de Recursos Humanos o bien con el supervisor del lugar donde trabaja. Opte por realizar una actividad relajante cuando salga, como el yoga o correr; con la finalidad de que el deporte le ayude a liberar el estrés de manera sana. Y absténgase de optar por vicios como fumar, apostar o el alcoholismo. Asegúrese de dormir mínimo siete horas para que tenga un descanso suficiente y pleno.
El síndrome del desgaste profesional debe de abordarse de una manera global y activa, en la cual se requerirán cambios en el ámbito personal y cambios que deben realizarse en la actividad que se practica; ya que tanto el ambiente de trabajo, como del lugar donde se habita y las actitudes con las que se reaccione, en conjunto deben modificarse positivamente para que se experimente una mejoría y por lo tanto la mitigación del sentimiento del desgaste laboral.
La solicitud de terapia psicológica resulta indispensable para poder lograr todos estos objetivos, así que no sienta miedo y ni vergüenza al pedir ayuda. Junto con el psicólogo y con su disposición, podrá mejorar su autoestima, la resiliencia y la asertividad; creando hábitos saludables que no solo le beneficiarán a nivel personal si no que van a repercutir positivamente en su ambiente profesional.
Imagen: despertar.com
Los ronquidos son los sonidos respiratorios sonoros, altamente irritantes para quien comparte la cama con usted, molestias ruidosas que semejan la comunicación de las morsas; clamores retumbantes que no solo confirman que mientras se duerme se sigue vivo, sino que son signos estruendosos anormales.
Los ronquidos o el acto de roncar son por lo general atribuidos a un trastorno del sueño conocido como apnea. Cuando se está durmiendo, los músculos se relajan, por lo tanto, la garganta y la lengua, al ser un conjunto de músculos, también lo hacen.
La lengua se retrae y el ronquido se produce cuando existe la obstrucción del aire en la boca, la nariz y la garganta.
Los factores que contribuyen a que ciertas personas ronquen más y otros no son: el sobrepeso, cualquier cantidad de kilos que aumente la circunferencia del cuello es un problema ya que, a mayor acumulación de tejido graso, mayor presión se ejerce sobre las vías respiratorias.
Así que la obesidad supera el sobrepeso, entonces es otro factor. Otros contribuyentes son tener el tabique nasal desviado, pólipos nasales, alergias, gripe, inflamación de las adenoides, macroglosia y apnea del sueño. En otras personas factores externos como el fumar, tomar alcohol, la toma de medicamentos que causan somnolencia y la fatiga, resultan predisponentes para roncar.
Todos en algún momento de la vida, es posible que lleguemos a roncar; pero según las fuentes bibliográficas, los hombres, las embarazadas, personas con antecedentes familiares de ronquido y el ser mayor de 40 años, son considerados factores de riesgo que incrementan las posibilidades de las causas de los ronquidos.
El roncar como oso en plena hibernación no solo es molesto para quienes escuchan tan desarmoniosa sinfonía, sino que la obstrucción respiratoria puede causar problemas orales, problemas de atención, de concentración y de la memoria; además de despertarse y sentirse agotado y con sueño durante todo el día.
Para minimizar los ronquidos de jabalí empiece por bajar de peso, evite tomar alcohol y absténgase también de fumar. Evite dormir boca arriba, en su lugar trate de dormir de lado, con esto se previene que la lengua se retraiga bloqueando la garganta.
Pero lo más importante es que acuda con un médico, incluso puede orientarse con su dentista. Más que nada infórmese antes de comprar productos, como parches, dilatadores nasales y guardas nocturnas prefabricadas y de venta libre.
Entienda que el roncar es un problema complejo que puede involucrar desde variaciones anatómicas que requieren alguna intervención quirúrgica tales como el de reacomodar el tabique nasal o remover las adenoides; como el de controlar alergias o a la utilización de una máquina CPAP, la cual utiliza presión de aire para mantener las vías respiratorias libres y se pueda dormir.
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La enfermedad de Munchmeyer, conocida también como fibrodisplasia osificante progresiva o miositis osificante progresiva, es una enfermedad que se hereda. Esta enfermedad se caracteriza por que los ligamentos, los tendones, la fascia y los músculos esqueléticos gradual y progresivamente se vuelven duros y rígidos hasta transformarse en hueso.
La miositis osificante progresiva es una afección rara y poco conocida que afecta a un poco más de 3 mil personas alrededor del mundo. Los bebés que nacen con este tipo de alteración genética tienen un aspecto normal a excepción de que el dedo gordo del pie es deforme. Pero con frecuencia la deformidad es ignorada o atribuida a otras causas.
Conforme avanza el tiempo, las estructuras anatómicas anteriormente mencionadas comienzan a osificarse, así que la deformidad se vuelve extensa, afecta otras zonas y crea limitación en el movimiento. Limitando el cuello, los hombros, las rodillas y la cadera al grado de que después resulta difícil caminar.
Eventualmente, a mayor edad se comprometen la masticación, el habla, la deglución, junto con dificultades de la musculatura torácica, acarreando problemas respiratorios que pueden amenazar la vida.
Los años que representan un verdadero reto para el paciente son la década de los 10 a los 20, puesto que en este periodo de tiempo aparecen nódulos inflamatorios dolorosos, en los cuales cuando cede la inflamación deja como resultado las áreas ya osificadas.
La rapidez con la que las zonas se transforman en hueso varía de persona a persona, depende de los músculos afectados, de la causa inicial que originó el brote inflamatorio y de la respuesta del sistema inmunológico, entre otros factores.
Las causas que pueden inducir el brote inflamatorio consecuentemente osificante son: caídas, golpes, tensión muscular excesiva, una inyección, cirugía y lamentablemente en otras circunstancias sin causa alguna; lo cual no indica que no importa qué tanta cautela se tenga. En ocasiones puede que los brotes inflamatorios se originen sin motivo alguno.
La persona con fibrodisplasia osificante progresiva requiere de asistencia y atención toda la vida. Ya que poco a poco su organismo requerirá de la ayuda de otras personas. Porque la enfermedad generara un alto impacto negativo en aspectos de actividades físicas, las capacidades funcionales y por ende la calidad de vida en general.
Será indispensable el apoyo familiar o de las personas con las que convive el enfermo, además de una asistencia médica especializada y psicológica permanente, ya que habrá actividades que la familia puede realizar por el enfermo, pero en etapas severas es probable que se requiera la hospitalización para poder ayudar a la persona a comer y respirar.
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Por ili.
El trastorno histriónico de la personalidad es un desorden del comportamiento en el cual una persona es emocional y dramática, al grado de que sus reacciones son exageradas y que tienen como único objetivo el llamar la atención de los demás.
Esta afección mental es de causa desconocida, pero los traumas en la niñez y la herencia son factores prioritarios para su desarrollo.
Se presenta con mayor frecuencia en hombres que en mujeres y según las estadísticas, es probable que el número de varones incluso sea mucho mayor al documentado, puesto que ellos usualmente se rehúsan a buscar ayuda profesional y por lo tanto carecen de un diagnóstico apropiado, así como de un tratamiento adecuado.
Por lo general, si la persona cuenta con este padecimiento, los primeros síntomas aparecerán en la niñez o después de los 20 años. Una singularidad del trastorno histriónico de la personalidad es que estos pacientes tienen la capacidad de desempeñarse en trabajos de alto nivel tanto social como laboral.
Otros síntomas incluyen: ser arrogante, prepotente y seductor o por el contrario demasiado fácil de influenciar y convencer; son exageradamente sensibles y dramáticos; tienden a culpar a otros por sus fracasos y errores; se preocupan demasiado por el qué dirán y como lucen. También buscan obsesivamente la constante aprobación y confianza de los demás; son altamente egocéntricos, superficiales e intolerantes y se irritan cuando las personas con quienes mantienen alguna relación no responden con adulaciones, gratificación o intimidad inmediatas.
El trastorno por lo general mejora con terapia psicológica y en ocasiones hasta con farmacoterapia psiquiátrica, pero sin tratamiento los problemas que ellos mismos provocan con otras personas eventualmente llegan a afectar tanto su vida laboral como la personal. Ya que las consecuencias de los conflictos de los que son parte pueden llegar a ser bastante serios y graves.
Los pacientes con este trastorno mental tienen una incapacidad de hacerle frente a los problemas y de hacerse responsables de lo que provocan; de igual manera su conducta los conduce a situaciones peligrosas y arriesgadas; todo esto con el fin de obtener más atención sobre todo de las personas de su interés e incluso sin que el sentimiento sea recíproco.
Los afectados con el trastorno histriónico de la personalidad y debido a su exagerada necesidad de llamar la atención, al no obtenerla pueden deprimirse y desarrollar pensamientos suicidas; así que son personas que necesitan un monitoreo constante de sus actitudes por parte de la familia o de quienes convivan.
Y si ya asisten a terapia psicológica, entonces tanto la familia como el paciente deben ser conscientes de que la intervención profesional es de por vida.
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Por Ili.
El intestino delgado es un órgano que forma parte del sistema digestivo y está recubierto en su interior por una sustancia mucosa, la cual alberga la microbiota e inmunoglobulinas del tipo A y estas forman parte de la flora intestinal normal.
En la hiperpermeablidad intestinal o en el síndrome del intestino irritable, existen alteraciones en la pared del intestino delgado, en la que existe una interrupción de la barrera mucosa, los enterocitos que son células tienen una unión defectuosa y también se presenta un infiltrado inflamatorio.
Todo esto permite que microrganismos y sustancias que viajan por el intestino atraviesen la pared intestinal hacia el torrente sanguíneo, en lugar de que continúen el curso normal de la digestión.
Provocándose cómo consecuencia un desequilibrio en la microflora y denominándose apropiadamente: disbiosis.
Los estragos que se manifiestan en el cuerpo al padecer esto son inflamación, alergias e intolerancias a alimentos que anteriormente no le causaban problemas y deficiencias nutricionales. De igual manera puede causar dolor de cabeza, diarrea, cansancio, dolor articular, dificultad para bajar de peso y la sensación de llenura o sentirse inflado.
Existen varios factores que aumentan la permeabilidad intestinal como el estrés, tener las defensas bajas, tomar antibióticos prolongadamente, dormir mal y seguir una dieta de alimentos altamente procesados.
El diagnóstico del síndrome del intestino hiperpermeable es difícil ya que los signos y síntomas previamente mencionados son comunes a otros problemas intestinales como la gastritis, las úlceras estomacales, la diabetes, la esclerosis múltiple y la enfermedad de Crohn, por mencionar solo unos cuantos ejemplos.
Y también puede asociarse a otros padecimientos como la diabetes, la artritis reumatoide, la intolerancia al gluten e incluso al asma.
Como medidas de prevención se recomienda tratar de reducir el estrés con actividades recreativas como hacer ejercicio, meditar y dibujar; dormir lo suficiente y bien; tomar agua en lugar de bebidas azucaradas y carbonatadas.
Idealmente, también debe de seguir una dieta nutritiva y balanceada; se deben cocinar bien los alimentos, consumir más verduras y vegetales bien lavados y desinfectados pero crudos; así como cereales integrales, granos y tomar lactobacilos para que ayuden a la microflora intestinal.
Es recomendable también evitar el café, el alcohol, medicamentos como el paracetamol y la aspirina.
Si nota algunos de los síntomas anteriormente comentados, no dude en visitar a su doctor, este puede referirlo con algún gastroenterólogo y un nutriólogo, de ahí juntos pueden trabajar para mejorar tanto su estilo de vida como sus síntomas.
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Por Ili.
El vitíligo es una enfermedad autoinmune de la piel causada por la destrucción de melanocitos. Los melanocitos son las células que producen el color en la misma y cuando se tiene vitíligo este se presenta como manchas blancas en diferentes partes del cuerpo.
Las causas de la aparición del vitíligo son desconocidas, pero se afirma que la herencia juega un papel importante, así como el padecer la enfermedad del hipertiroidismo, el estrés y el sol, los cuales son considerados factores predisponentes para el desarrollo de esta afección dermatológica.
Las manchas del vitíligo pueden aparecer en las manos, los labios, las axilas, la ingle, alrededor de los ojos, alrededor de las fosas nasales, en el área genital y el ombligo.
La jiricua, como a veces se le denomina cotidianamente; con el paso del tiempo también se extiende a otras partes del cuerpo.
Los métodos de tratamiento para el vitíligo son cremas tópicas que ayudan a mejorar e igualar la apariencia del color de la piel, pero también hay medicamentos orales y terapia con rayos ultravioleta; otra opción es los tratamientos quirúrgicos como un injerto de piel y tratamientos cosméticos como el uso de maquillaje o tatuajes estéticos.
Cabe aclarar que la también conocida como “jiricua” no es una enfermedad contagiosa, ni limitante ni mucho menos degenerativa. Las personas que tienen vitíligo no solo tienen que lidiar con la despigmentación de la piel, si no que en muchos casos es indispensable que el paciente reciba apoyo emocional.
Por lo tanto, el paciente debe de apoyársele con un equipo médico que cuente con un dermatólogo y un psicólogo, para poder sobrellevar la condición.
El vitíligo es de causa desconocida, puede presentarse en cualquier individuo de entre los 20 y 30 años, y sin importar género. Su prevención radica en llevar una vida relativamente balanceada entre el estrés y las banalidades de la vida cotidiana, además del uso de un bloqueador solar como coadyuvante.
Si sospecha que tiene jiricua, no asuma ni entre en pánico, no se unte lo que le recomendaron por ahí, no compre los productos que venden en la televisión, por internet, por catálogo o en los mercados.
Lo mejor es acudir con un dermatólogo, para que lo saque de dudas; una vez que se confirme que tiene vitíligo, aprenda a comprender su enfermedad para que sepa escoger los productos que le resulten eficaces y que estén aprobados y avalados por una institución médica conocida.
El vitíligo no provoca síntomas, las personas que la padecen llevan una vida longeva y normal. Incluso algunas son famosas; el reto es estético y a la vista todo puede ser magnífico cuando se lleva con dignidad.
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