Petrita fue la primera mujer Delegada de San Pedro Tesistán. Foto: María del Refugio Reynozo Medina
Por María del Refugio Reynozo Medina.
Petrita tiene unos doscientos ahijados; ¿acaso resultado de la cercanía con la comunidad de San Pedro Tesistán, de la que es originaria y a la que gobernó como delegada en tres periodos de tres años?
-¿A poco nos irá a gobernar una vieja?- habría dicho uno de los hombres ensombrerados que se resistía a tener una mujer en la Delegación.
Petra Partida Lorenzana fue también estudiante de la primera generación que terminó el sexto grado de primaria en la localidad de San Pedro y también de las primeras mujeres, que eligieron salir del pueblo para seguir estudiando. Ella cursó la carrera de Contador Privado y es jubilada de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, en donde laboró por 32 años.
Fue en el año de 1995 cuando un grupo de personas la buscaron para solicitarle ser Delegada. Cuando aceptó, la primera dificultad fue pensar en una comunidad liderada siempre por hombres. En ese momento, las dificultades que aquejaban al pueblo eran el abastecimiento de agua potable y la necesidad de drenaje. Sus tres contendientes eran hombres. –Me los dejo cortar si gana-, dijo uno de los simpatizantes refiriéndose al posible triunfo de Petra.
El día de la elección, Petrita contó con la presencia de sus compañeros de trabajo. Estacionadas alrededor del kiosco estaban tres patrullas de la policía Federal. Las personalidades del Ayuntamiento también hicieron presencia.
-Esa vez yo sí voté por mí- dice Petrita al recordar esa aquella jornada y se sonríe. En la plaza estaba reunida gran parte de la población, era un acontecimiento nunca antes visto. Había congregados grupos muy definidos. Los ganaderos, los ejidatarios y las mujeres. Al hacer el conteo, Petrita resultó ganadora por varias decenas de votos.
Quién sabe de donde apareció una banda de música y al son de la tambora y los aplausos, la mayoría de los votantes celebraron a su primera delegada. Petrita sorprendida, vio que comenzaron a llegar con ollas de birria, comida y se instalaron en el edificio del kínder. Todo estaba preparado para celebrar a la Delegada.
El 1 de mayo de 1995, Petra tomó posesión como Delegada, otra vez de entre las calles apareció la banda de música y la celebración siguió.
Sabes que no creí que nos fueras a ganar- le dijo un hombre de sombrero, resignado.
-Como una mujer- y se rascaba la cabeza. Dicen que un señor se fue del pueblo porque no pudo soportar el triunfo de una mujer. Y otro hasta lloró.
Los primeros meses fueron más difíciles, una ocasión andaba en el crucero con una cuadrilla de trabajadores y allá le llegó la noticia de que el grupo de ejidatarios entrelazados de las manos iban rumbo a la Delegación a hacerle una protesta, pero Petrita andaba muy ocupada en los trabajos de la carretera.
Cuando asumió su mandato se encontró con un espacio sin agua y sin baño. Ni siquiera material de oficina había en la Delegación; ni un lápiz, y de su bolsillo comenzó a comprar, pues del Ayuntamiento no se recibía nada. Los Delegados en ese tiempo no tenían un sueldo. Un día convocó a sus compañeros delegados del Municipio; todos varones y hablo con ellos sobre el derecho de tener un sueldo por el trabajo. Entonces, en la siguiente junta de cabildo; la Delegada Petrita apareció solicitando el derecho de percibir un salario. Consiguió su cometido; desde entonces los Delegados hasta el día de hoy perciben un sueldo.
Por poco le cuesta el puesto, porque un día le llamaron del Ayuntamiento; cuando acudió, el funcionario le dijo que firmara su renuncia, por “malos manejos”
-Yo no recibí la Delegación aquí, la recibí en mi pueblo en medio de mi gente-
Petrita le solicitó al personaje del Ayuntamiento que acudiera al kiosco de San Pedro para recibir ahí mismo la notificación con el pueblo como testigo y le exigió pruebas de los “malos manejos”.
En la siguiente sesión de Cabildo, Petrita se les volvió a aparecer y les solicitó una auditoría para San Pedro Tesistán y otra para el Ayuntamiento de Jocotepec. Exigió que llamaran al auditor y con todo y la resistencia del Presidente Municipal, lo llamaron para agendar las diligencias que llevaron al Ayuntamiento de Jocotepec a comparecer ante el Congreso del Estado.
Fue en otra comparecencia de Petrita en una sesión de cabildo; en la que exigió la urgencia de plantas tratadoras de aguas negras, no solo para San Pedro Tesistán, también para San Cristóbal Zapotitlán; por las calles de San Pedro corrían aguas malolientes con restos de comida.
-Los pueblos no justifican todo ese gasto- habría afirmado la autoridad municipal. El desabasto de agua potable fue una de las urgencias que la nueva delegada mitigó con pipas de agua que trajo del municipio.
La bomba que había estaba obsoleta. Recuerda que cada que la encendían había algún incidente con los aparatos domésticos que los dañaban. Finalmente, ella realizó las gestiones para la rehabilitación del pozo y el reemplazo por una bomba sumergible.
Para el drenaje y las plantas tratadoras de aguas residuales; hizo los oficios correspondientes a las instancias que ya conocía. A través de su trabajo en el medio de la SCT (Secretaría de Comunicaciones y Transportes), le informaron de una visita del presidente Ernesto Zedillo a Chapala. Petra consiguió una invitación personal con asiento numerado y preparó de nuevo sus oficios. Ese día llegó a Jocotepec a dejar su informe de actividades.
-Ahorita no se lo podemos recibir, vamos a una “junta colegiada”-. El presidente municipal andaba de traje y los miembros de su gabinete igual. Brillaban de elegantes.
Petra salió de ahí y se fue en autobús para estar en la gira del Presidente Zedillo. Allá se encontró con sus compañeros del Ayuntamiento, los que iban a la “junta colegiada”.
-¿Por donde entraste?- le preguntó uno de ellos que estaba atrás de la malla observando la pasarela de las personalidades importantes. Estaban allí, detrás de la malla ciclónica todos los regidores encorbatados que se conformaron con mirar.
La invitación de Petra venía desde Palacio Nacional, así que ocupó uno de los lugares de enfrente, luego de pasar por al menos dos filtros.
Cuando terminó el evento, Petrita con cámara fotográfica en mano se apresuró a saludar al Presidente de la República y entregar los oficios.
Ahí estaba también el Gobernador de Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez; él les tomó la foto, que ahora Petrita guarda con aprecio.
El Presidente Zedillo, encargó a Alberto Cárdenas que atendiera la petición; a partir de ahí, la Delegada firmó convenios con el Banco Mundial y otras instancias, que llevaron tras arduos meses a inaugurar las plantas tratadoras de Aguas residuales en el año 2000.
-Solo hice lo correcto- dice esta mujer que fue elegida por su pueblo en tres periodos. -El cuarto ya no quise- Dice con un suspiro y sonríe.
El neopresbítero Rubén Beltrán Santana hace su entrada para la celebración de su cantamisa.
Por: María del Refugio Reynozo Medina.
San Cristóbal Zapotitlán en el municipio de Jocotepec, fue el lugar asignado para que Rubén Beltrán Santana, originario de Santa Rosa de Lima, en Guerrero, ofreciera su servicio diaconal como parte de su formación para el sacerdocio.
Fue el 2 de septiembre de 2021 cuando el diácono Rubén llegó a la comunidad.
La entrega de la primera casulla por parte de Benita Lomelí y Francis Quirarte, feligreses de la comunidad de San Pedro Tesistán.
“Lo primero que experimenté cuando entré en el atrio fue una gran paz y alegría y dije: este es un buen lugar para ser feliz y servir en nombre de Cristo a la comunidad”.
Cuando Rubén escuchó su asignación, buscó inmediatamente el poblado, una de sus preocupaciones era lo distante o inaccesible que pudiera estar, la cercanía con la Ribera de Chapala auguraba buenas experiencias, pero el contacto y convivencia con la comunidad superaron las expectativas.
Las primeras personas que recibieron al diácono Rubén, bajo el liderazgo del señor Cura Carlos Enrique Medina, convirtieron su experiencia en un encuentro cálido.
Una de las cosas que aprendió al lado del presbítero Carlos fue su entrega al servicio de la comunidad, su incansable labor para llegar a todos lados y llevar los servicios sacerdotales a todos los rincones.
Luego de nueve meses de diaconado, llegó el gran día de la ordenación sacerdotal. El padre Rubén recibió el orden sacerdotal el 4 de junio de 2022 en el Santuario de los Mártires Mexicanos de Cristo Rey en Guadalajara.
El Padre Rubén eligió la parroquia de San Cristóbal para presidir su primera misa o cantamisa.
“El sacerdocio no es algo que me pertenece, es don de Dios para la Iglesia”, por eso, el que haya realizado mi primera misa en la comunidad donde serví como diácono, es una señal de aquello que Dios me pide en el ministerio en adelante”.
Para el padre Rubén, la ordenación presbiteral significa no sólo la celebración de la primera misa, sino el inicio de una vida consagrada al servicio del Reino de Dios.
El padre Rubén realiza la lectura de la Palabra.
El domingo 19 de junio, las comunidades de El Sauz, San Pedro Tesistán y San Cristóbal Zapotitlán, se unieron en celebración para recibir al nuevo sacerdote.
En una ceremonia llena de júbilo, más de dos centenares de fieles se dieron cita para escuchar la misa del ahora padre Rubén. La soprano Liliana de Robles y su ensamble armonizaron la celebración que duró poco más de una hora.
La imagen de San Cristóbal y de la Virgen María estuvieron presentes, bajo un toldo blanco, lucieron con enormes ramilletes de flores blancas.
Luego de la celebración, los feligreses se unieron para compartir el pan en una comida comunitaria organizada por las comunidades pastorales y los fieles de las parroquias; manos de hombres y mujeres trabajaron para preparar los alimentos que se compartieron en el atrio del templo bajo los toldos y la sombra de los árboles.
El padre Cristóbal y el señor Cura Carlos Enrique durante la celebración que estuvo galardonada con la imagen del patrono San Cristóbal.
El padre Rubén se lleva en el corazón a las personas del pueblo:
“San Cristóbal ha sido un lugar especial para mí, porque con ellos he aprendido cómo ser un sacerdote entregado, y dispuesto a trabajar por el Reino de los Cielos, su amor a las Sagradas Escrituras, su devoción a la Santísima Virgen María y sin duda alguna, sus muchas fiestas como dicen ellos: Somos muy fiesteros. Celebrar mi primera misa con ellos sin duda alguna nos motiva a crecer en nuestra fe y en comunión de nuestro pueblo, ya que para que esta celebración se llevará a cabo se necesitó de la ayuda y cooperación de todos. Por lo que estoy inmensamente agradecido”.
El padre Rubén, no sólo ora y piensa en las comunidades de fieles que están cerca, también piensa en aquellos que por diversas circunstancias se encuentran alejados de la iglesia:
“Quiero en mi vida ser yo el que se acerque a ellos y, a través de la configuración con Cristo que exige y acompaña la gracia en el sacerdocio, quiero tener los sentimientos de Cristo para que aquellos alejados sientan la presencia de Dios en sus vidas y se acerquen a la comunidad eclesial, Cuerpo Místico de Cristo”.
Los voluntarios colocaron el aserrín en una jornada de cuatro a cinco hora. Foto: María del Refugio Reynozo Medina.
Por: María del Refugio Reynozo Medina
No sé exactamente desde cuando estas paredes presencian los himnos y cantos de fervor a la Virgen de Guadalupe; mis abuelos que nacieron aquí en 1917, tenían memoria de ello. Pareciera que todo el altar se estremece con las notas de la banda de mi pueblo. Algo sucede en el corazón de los nacidos aquí cada 30 de diciembre pasadas las seis de la mañana, cuando los músicos entonan los valses, pasodobles y las mañanitas en torno a la imagen morena que en el penúltimo día del año aún se sigue celebrando.
El altar está revestido de cortinas tricolores en el centro, formando una bandera sobre la que reposa un cuadro de la imagen de la Virgen de Guadalupe, con un sólido marco plateado de unos 2 x 1 m.
La decoración del templo está a cargo de Genaro Reyes Gallardo, que lleva 40 años diseñando el ornato.
Hoy es la celebración solemne y comienza con las mañanitas.
La imagen peregrina que es una escultura de pasta; descansa al pie del altar sobre una pequeña mesa con un respaldo azul, rodeada de una guirnalda de rosas.
No basta con la celebración del día 12 de diciembre; hoy los pobladores se preparan para recibir el paso de la imagen por las calles principales de San Cristóbal.
El cuadro de la Virgen de Guadalupe es montado sobre un marco de flores. Desde la una de la tarde Genaro Reyes Gallardo, que ha sido por 40 años el diseñador de los ornatos, coordina la decoración del carro que llevará a la Virgen Morena.
Más de dos centenares de rosas, claveles y crisantemos enmarcan a la imagen que va sobre una pequeña plataforma.
A las cuatro de la tarde, las calles hierven de personas deambulando con aire festivo.
Afuera de una vivienda, una familia prepara un arco sostenido por barras de metal y forrado con ramilletes de flores frescas y telas entrelazadas, mientras toman de sus vasos y conversan risueños. Dos calles adelante, un hombre lanza enérgicamente baldazos de agua a la calle empedrada que ya está barrida. El aroma a tierra mojada perdura por más de una cuadra durante mi recorrido. En otra casa, una mujer coloca un ramo de flores en un pequeño altar improvisado afuera de su domicilio.
En este barrio que la gente llama barrio bajo, al lado de las calles regadas reposan bolsas negras con basura, otras bolsas y cajas con desechos están a la entrada de las casas; en algunas se percibe el aroma a descomposición. Dice una mujer que el último día que pasó el camión recolector del municipio fue hace más de siete días.
La basura rezagada también recibió el paso de la imagen durante la procesión.
La calle Ramón Corona también se viste de aserrín multicolor.
Por la calle Ramón Corona Oriente, un grupo de personas esparcen aserrín teñido conformando un mosaico con la imagen de la Virgen de Guadalupe y ramos de rosas; el tapete cubre unas cuatro cuadras que han sido cerradas a la circulación por los organizadores. Los voluntarios van armados con carretillas, baldes y costales llenos de aserrín multicolor y recorren las calles bordando con el polvo de madera el suelo empedrado.
Sobre la calle Porfirio Díaz, un grupo de jóvenes y niños arman otro tapete de aserrín con la imagen de la Virgen de Guadalupe y más rosas. Una niña de unos seis años camina con un pequeño balde y espolvorea el aserrín. En la esquina, se levanta un arco más de flores frescas.
Un hombre en la misma calle clava en la pared un lienzo con la imagen de la Virgen de Guadalupe y coloca luces de colores alrededor. La delegada Rosa Villa, mandó traer una grúa para retirar los vehículos que no atienden la indicación de despejar las calles principales.
A las seis de la tarde se escucha la primera llamada, la gente comienza a pasar y se dirige al templo. Hay mujeres con blusas de toques étnicos, niñas caracterizadas de la Virgen de Guadalupe, niños con atuendos de manta y tilmas con la imagen de la Virgen del Tepeyac.
Al frente de la procesión que congrega a más de quinientos fieles va la danza, dos hombres jóvenes cargan un tambor que de vez en cuando golpean con fuerza; en seguida, el grupo de danzantes emite un agudo grito para luego ejecutar la serie de bailes del ritual. También va el grupo de adoradores con sus banderas blancas y al final de la procesión va la banda de música.
El tapete de aserrín de la Calle Ramón Corona se extiende hasta por cuatro cuadras.
Comienza a oscurecer y los rostros de algunos peregrinos se iluminan por las velas encendidas que llevan en las manos.
Al llegar al templo, el cuadro con la imagen es bajado de la plataforma y conducido al altar en medio de los pabilos ardientes y miradas de fervor. Los músicos entran tocando el Himno Guadalupano, las brillantes plumas de los danzantes se mueven al compás del tambor y el caracol y los fieles rompen en aplausos, algunos hasta las lágrimas.
Las paredes del templo vuelven a estremecerse y la imagen reposa en su trono de flores.
El incendio que se suscitó el primero de mayo tuvo una afectación de más de 110 hectáreas. Foto: archivo.
Miguel Cerna.- El Pleno del Ayuntamiento de Jocotepec aprobó el pasado 21 de mayo la creación de una Comisión Edilicia transitoria que tendrá como objetivo, analizar, investigar y dictaminar la sanción para quien resulte responsable del siniestro en el cerro de San Pedro.
El incendio que se provocó el primero de mayo en el cerro de la localidad de San Pedro Tesistán, tuvo una devastación de más de 110 hectáreas, afectando a la flora y la fauna de la zona, explicó el Síndico Juan José Ramírez Campos, por lo que instó a no dejar el tema impune.
“No podemos dejar pasar este tema con el puro hecho de que ya atendimos el incendio y se sofocó, necesitamos sancionar al responsable porque en nuestra Ley de Ingresos vienen sanciones tanto por tala, por poda, por quemazones, por incendios provocados”, dijo a los ediles durante la Sexta Sesión Ordinaria.
De acuerdo con el expediente armado por sindicatura, el presunto responsable sí recibió un permiso de desmonte, pero dicho documento prohíbe la utilización de fuego, así como la poda y la tala de árboles.
La creación de la comisión transitoria surgió como opción ante la insuficiencia del acta de hechos elaborada por Protección Civil y la denuncia penal presentada por el municipio ante el Ministerio Público, por lo que este órgano tendrá la responsabilidad de dictaminar el castigo o establecer las condiciones para la reparación de los daños.
Por su parte, el presidente municipal José Miguel Gómez López consideró como “histórica” la instauración de dicho procedimiento, ya que en el municipio era costumbre realizar podas, talas y quemas con solo adquirir el permiso de desmonte.
Con el cambio en las políticas y con la protección del medio ambiente como tutela, destacó que será la primera vez de muchas que Jocotepec castigará a alguien por actuar con irresponsabilidad en este ámbito.
“Es la primera vez que se va a realizar un procedimiento en este tema que jamás se había hecho y la verdad no podemos satanizar al agricultor o al posible responsable, porque aquí se acostumbraba a la autorización de desmonte y le daban tala y quemaban; así se usaba. Ya cambiaron las leyes, hoy se está tutelando la cuestión del medio ambiente de una manera más marcada, entonces va ser el primer caso, va a ser el ejemplo”, concluyó.
Desde el 25 de marzo volvió a operar la PTAR de San Pedro.
Miguel Cerna.- Luego de ocho años, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de la delegación de San Pedro Tesistán volvió a operar, evitando así las descargas directas al Lago de Chapala.
Cuatro litros por segundo de aguas negras, es lo que representa la reparación de la planta, según informó Antonio Flores Plascencia, director del Sistema Integral de Gestión de Agua y Drenaje de Jocotepec (SIGAD), lo que beneficia a una población de 2 mil habitantes.
Las obras de rehabilitación concluyeron el pasado 25 de marzo, luego de la renovación del equipamiento de aparatos como aireadores, bombas sumergibles y de sólidos, un sistema de desinfección a través de la cloración, entre otros trabajos.
La inversión en la PTAR de San Pedro alcanzó los 560 mil pesos de recursos estatales y federales, más las aportaciones municipales por mano de obra y la compra de otros artículos. Con dicha planta y la reactivación de la de San Cristóbal Zapotitlán, las dos PTAR a cargo del municipio están nuevamente funcionando.
En materia del saneamiento de las aguas residuales, Flores Plascencia informó que trabajan en un proyecto para la construcción de una planta de tratamiento en la delegación de El Molino, debido a que desembocan en la presa.
“Queremos hacer una planta de tratamiento en El Molino, así más o menos de rigurosa como las que se tiene en el (margen) del Lago de Chapala, o sea, como si fuéramos a descargar con cuerpo tipo “C” que son las mayores restricciones que pone la CONAGUA, para el saneamiento”, explicó.
En los planes, también está la activación de este tipo de mecanismos tanto en Potrerillos como en Las Trojes; pero dependerá de los recursos a los que se pueda acceder con la Comisión Estatal del Agua.
Foto: Cortesía.
Redacción.- Luego de más de un año y medio sin funcionar y tras los trabajos de renovación y equipamiento, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de la delegación de San Cristóbal Zapotitlán retomó operaciones.
El director del Sistema Integral de Gestión del Agua y Drenaje (SIGAD), José Antonio Flores Plascencia, informó que el pasado 18 de marzo se finalizó con los trabajos de renovación en la PTAR, que cuenta con una capacidad para tratar 4 litros por segundo.
Las labores comprendieron la limpieza de sedimentos, la instalación de dos aireadores de agua, bombas para el desaguado y la recirculación de lodos, así como la renovación de todo el sistema de inversión.
Fue gracias a que el municipio accedió a un recurso estatal de un millón 100 mil pesos, para el fortalecimiento de las PTAR de San Cristóbal y San Pedro Tesistán, que se permitió la renovación, además del medio millón que pagó el gobierno para la mano de obra
Un choque de una unidad de transporte público dejó un saldo de 15 personas lesionadas, aunque afortunadamente ninguna de ellas de gravedad. El accidente se registró la mañana del lunes 29 de julio, a la altura del balneario “El Salto”.
Los afectados resultaron con lesiones leves que no pusieron en riesgo su vida. La circulación en la zona tuvo que ser cerrada. Dos de las víctimas fueron trasladadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Ocotlán, mientras que otra fue atendida en Cruz Roja. Los demás fueron servicio médico en el lugar del accidente.
El accidente se registró la mañana del lunes 29 de julio.
El accidente se ocurrió cuando la unidad se dirigía a San Pedro Itzicán, la unidad de transporte público quedó impactada en la parte del conductor, desconociéndose si existió otro vehículo involucrado.
A lugar llegaron elementos de la Protección Civil y Bomberos de Poncitlán, quienes apoyaron las labores de atención a los afectados.
Al accidente llegaron elementos de Bomberos de Poncitlán.
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