Zona intervenida por el restaurante El Bambú, en Piedra Barrenada. Foto: Armando Esquivel.
Armando Esquivel.- Que no fue una invasión al Lago de Chapala lo realizado por un restaurante de Piedra Barrenada, según lo declarado por José de Jesús Gaytan Cuevas, director de Desarrollo Urbano en Jocotepec, asegurando que una parte de la intervención fue clausurada e informando que la dirección de Ecología ya aplicó una “sanción”, que correspondería a la donación de cien arbolitos.
En entrevista, el director de Desarrollo Urbano defendió que no hubo ningún acto invasivo sobre la propiedad federal, calificando como absurdo el que se esté invadiendo el lago y comparó el caso con una reparación de albañilería.
“Yo no doy permisos para eso, yo no doy permisos pero sí puedo impedir que hagan invasiones, en este caso yo, hasta el momento digo, yo no veo una invasión como se dice en el video por ahí que sacaron, que están invadiendo la laguna a diestra y siniestra, son palabras absurdas, palabras que para mi no es así porque yo fui a verificarlo, no hay una invasión a diestra y siniestra, simplemente se hizo una renovación como cuando a tu casa se le cae un enjarre y le vas a echar un parche para que quede ya parejo”, dijo Gaytán en entrevista para Semanario Laguna.
Gaytán Cuevas aseguró que tampoco hubo un acto contra el medio ambiente por medio de un terraplén, señalando que ya existía una rampa pero esta se desgastó.
“No es una invasión (reportero: ¿pero un terraplenado al lago?) Si tú puedes revisar tampoco es un terraplenado como tal, simplemente fue una nivelación que hicieron de lo que ya tenían, es lo mismo, es la misma plataforma que había, nomás que estaba ya muy carcomida”, contestó el funcionario.
Gaytan Cuevas informó que se realizó una clausura parcial en una zona donde se colocaron piedras. “En el área nueva, o lo que él puso de más donde echó la piedra, yo le clausuré, le dejé clausurada la zona donde puso la piedra”, dio a conocer el director.
José de Jesús Gaytan dijo haber estado de manera personal en el área intervenida, pero no encontró problema mayor.
“En la inspección que yo hice, yo verifiqué lo que ya estaba viejo y se ve eso claramente y a un lado lo que hizo él es poner piedra, como piedra de contención para que no se estuviera desgranando la rampa, para que no estuviera cayéndose el terraplén que ya había y puso como piedras de contención para poderle echar encima, a lo que hicimos de inspección cálculo fueron tres viajes o cuatro cuando mucho, de balastre, lo que le puso en la parte de arriba para nivelar, para que alcanzara a bajar hasta el lago, pero es una plataforma que ya existía porque ya la conocemos desde hace años, yo ya la había visto desde que entré aquí como director” dijo.
Parte de lo informado fue que el dueño del restaurante El Bambú no se acercó al gobierno municipal para obtener un aval, sumado a que la autoridad municipal no cuenta con facultad para otorgar permisos. A decir de Gaytan, quienes intervinieron la orilla del lago sí cuentan con una concesión por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), misma que en el momento de la inspección local no la mostró, aunque el director jocotepense aseguró que hace tres o dos años, ya había visto en específico esa concesión.
El que la acción fue para facilitar el acceso a las embarcaciones, ya que con lo realizado hasta al director se le complicaba caminar por el lugar, fue parte de lo que dijo el director para justificar los hechos, informando también que la Dirección de Ecología aplicó una “sanción”, en la que la persona propietaria del restaurante tendrá que pagar en arbolitos. “Ecología también estuvo presente, de hecho se le hizo una sanción para hacer reforestación por 100 especies, 100 árboles para aportarlos a ecología” informó.
El municipio no cuenta con facultades legales en la zona federal, por lo que se cuestionó al director de Desarrollo Urbano si enviarán el caso a Sindicatura para que esa área gubernamental del municipio solicite una revisión de la autoridad federal. “Pueden ser 30 días, pueden ser 40 días, no sé, depende el trabajo cómo tengamos”, finalizó el entrevistado.
Zona en la que se realizó el relleno al Lago de Chapala por parte de un restaurante. Foto: Armando Esquivel.
Armando Esquivel.- Una presunta invasión federal se realizó a la vista de todos en la zona de Piedra Barrenada, en Jocotepec, detrás del restaurante “El Bambú”, donde se tiraron piedras y tierra al Lago de Chapala, para llegar a las embarcaciones.
El hecho salió a la luz mediante un video en redes sociales, publicado el 14 de marzo, donde se observó a un camión tipo tortón descargando tierra y piedras en el vaso lacustre, mientras una máquina retroexcavadora acomoda el material y termina de arrojarlo, con el fin de terraplenar el área.
En una visita se pudo constatar el material esparcido y el terraplenado en una parte que antes era lago, con algunas personas aún trabajando con carretillas para dar forma a lo que busca ser un improvisado muelle de alrededor de 10 metros de largo por tres de ancho, mientras que en la punta ya se encontraba una pequeña embarcación.
Al respecto, el presidente de Jocotepec, José Miguel Gómez López, quien se dijo enterado del tema, y aunque aseguró estar en la posición de no permitir arrojar materiales al lago, mencionó que el encargado de la dirección de Desarrollo Urbano, José de Jesús Gaytán Cuevas, minimizó el caso ante el primer edil, justificándose con que solamente se hacía un acomodo de tierra.
“Me reportó Desarrollo Urbano, que de la misma tierra que había ahí, la acomodó para las embarcaciones, ya le comenté que ni para las embarcaciones ni para nada se puede estar haciendo acomodos ni mucho menos vertiendo tierra o piedras o material a la laguna, eso no se debe de hacer y debió ya de haber procedido Desarrollo Urbano en sancionar y tomar ya cartas en el asunto”, dijo el presidente.
Luego de la respuesta del presidente, se volvió a cuestionar sobre el terraplenado, con el fin de conocer si se otorgó algún permiso por parte del Ayuntamiento de Jocotepec, ya sea verbal o escrito, así como el saber si se realizaron sanciones y cuáles fueron, además de conocer si la autoridad municipal realizó denuncias ante la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (PROFEPA), o si la dirección de Ecología de Jocotepec acudió al punto señalado, a lo que el alcalde dijo pediría un informe, el cual no pudieron entregar, ya que supuestamente, la dirección de Desarrollo Urbano cuenta con muchos reportes. Al final, se concretó una entrevista con José de Jesús Gaytán Cuevas, pero agendada para después del cierre de esta edición.
Según el mapa localizador REPDA de aguas nacionales, zonas federales y descargas de aguas residuales, de la Conagua, en la zona existen algunas concesiones, sin embargo, estas son para la prestación de servicios, es decir, sin que se autorice alguna construcción o terraplenado, además, la mayoría de las convenciones en esa zona se encuentran vencidas.
Desgaje en el cerro de San Juan Cosalá, frente a la zona restaurantera de Piedra Barrenada. Foto: Armando Esquivel.
Armando Esquivel.- Aún no se sabe exactamente con qué fin se realiza la intervención con maquinaría en un cerro de San Juan Cosalá, ya que el Gobierno de Jocotepec informó que están en la revisión del caso.
Fue a mediados de noviembre cuando una máquina retroexcavadora se pudo observar en el cerro frente al restaurante “La Iguana de Piedra”, en Piedra Barrenada, realizando raspones en la zona montañosa y dejando un claro manchón en la vegetación; aunque las autoridades informaron que el permiso era sólo para retirar maleza de un camino peatonal, hasta el momento no hay certeza de la o las personas responsables, ni de lo que se pretende hacer en el lugar.
Luego de que este medio evidenciara los trabajos (Edición 605), la máquina pesada siguió laborando; al cuestionar al presidente de Jocotepec, José Miguel Gómez López, dijo estar consultando el caso con la dirección de Desarrollo Urbano.
“Solicitaron la autorización nomás para el camino, liberarlo, el camino peatonal que ya había, es limpiarlo, pero le pedí al que trae la obra que fuera a Desarrollo Urbano y a Ecología para que le den los dictámenes correspondientes de factibilidad y viabilidad, ya están en ello, ya están trabajando”, informó el alcalde, comprometiéndose a revisar el motivo por el que la maquinaría sigue trabajando.
Luego de esta respuesta, se solicitó al alcalde información respecto a la intervención, específicamente para saber si el propietario se había acercado para aclarar qué es lo que se realiza en el cerro, así como el saber si el ayuntamiento de Jocotepec procedería con una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), como se hizo en el caso del dragado al Lago de Chapala, en San Cristóbal Zapotitlán; sin embargo, al cierre de esta edición no se obtuvo respuesta.
A un costado del área que fue desgajada se realiza la ampliación de un camino, pero no a modo de remoción de maleza, como se mencionó por el alcalde, sino con la intervención de una retroexcavadora que remueve tierras y un camión de volteo, con la aparente intención de generar paso a vehículos, con todo y la construcción de un muro de piedra y cemento.
Del material extraído del cerro no se sabe qué uso se le dio, aunque para realizar esta acción es necesario contar con diversos requisitos, entre ellos un dictamen de impacto ambiental.
Otro de los problemas con la intervención a la montaña, es el riesgo de deslaves, ya que tampoco se conoce si para los trabajos en el cerro se cuenta con el aval de Protección Civil y Bomberos, considerando el historial de deslaves en la zona de San Juan Cosalá.
Máquina que realiza el raspado del cerro en San Juan Cosalá. Foto: Alejandro Ibarra.
Armando Esquivel.- Maquinaría pesada se ha observado trabajando en uno de los cerros de San Juan Cosalá, dejando un desgaje en el área verde visible desde lejos; mientras que autoridades de Jocotepec aseguraron que a ellos les dijeron que sólo iba a moldear un camino.
Durante la tercera semana de noviembre, se observó a una máquina retroexcavadora en la zona montañosa, a la altura de la zona restaurantera de Piedra Barrenada, frente al restaurante “La Iguana de Piedra”.
La remoción de rocas y tierra del cerro, provocadas por instrucción de un particular, ha dejado una notoria marca en la montaña, así como el coraje e indignación de algunos usuarios de Facebook que vieron el desgaje por medio de un video.
Al cuestionar al municipio, se confirmó que la dirección de Desarrollo Urbano, a cargo de José de Jesús Gaytán Cuevas, sí tenía conocimiento del tema, pero sólo había luz verde para un proyecto de ampliación del camino, asegurando que no hay autorización para alguna construcción.
A su vez, el presidente de Jocotepec, José Miguel Gómez López, también dijo que no hay autorización para efectuar ninguna obra o para hacer el desgaje y que sólo dieron la venia para extender un camino peatonal.
“No es ahorita una obra ni nada al respecto, es el modelo del camino, pero le estoy pidiendo que vaya a revisar y que le pida que entregue primero el proyecto, en qué consiste, y lo haga vía solicitud para autorizarle. Sí nos había comentado, le dijimos que no le veíamos inconveniente a que moldeara el camino, el camino que ya había, pero sí es necesario que lo haga con todas las de la ley, que solicite también un dictamen de impacto ambiental, que tengamos la garantía que no vaya a haber riesgos y demás”, dijo el mandatario municipal, asegurando que ya se notificó a la persona propietaria que interviene el lugar.
La creadora del concepto Barra Mar, Ely Gutiérrez en compañía de su familia inauguraron Cantaritos Barra Mar en Piedra Barrenada. Foto: Domingo Márquez.
Redacción. – Con un corte de listón se inauguró el restaurante Cantaritos Barra Mar, en la zona restaurantera de Piedra Barrenada, en la delegación de San Juan Cosalá, el segundo de la familia Barra Mar.
Durante la apertura del restaurante, los invitados presenciaron la bendición del lugar, además de un variado buffet gratuito, en el que se pudieron degustar diferentes variedades de pescados y mariscos, acompañados de la música del mariachi.
Luego del corte de listón, Ely Gutiérrez como iniciadora del concepto Barra Mar, agradeció la compañía de los presentes, a la vez que compartió: “este es un negocio que se creó con muchos sueños, muchas ilusiones y esperando que a todos nos vaya bien y que Dios nos multiplique nuestros buenos deseos y que siempre esté con nosotros. Gracias”.
Por su parte, Jorge Hernández, como socio, reconoció el esfuerzo de los que hicieron posible la inauguración, a la vez que adelantó la apertura de un tercer restaurante Barra Mar en el mes de septiembre.
Cantaritos Barra Mar es un espacio familiar ambientado con terrazas hechas tronco y palma, que se ubica a la orilla del lago de Chapala, por lo que además de los jarritos y el típico sazón de la comida costera de Nayarit, los comensales podrán disfrutar de una vista inigualable del Lago de Chapala.
En entrevista, los coordinadores de Barra Mar, Giovani y Tadeo Gutiérrez, aseguraron que el concepto es un poco diferente al de Barra Mar Ajijic, ya que el lugar se encuentra a la orilla del lago, por lo que además de la vista se ofrecen paseos en un catamarán y el menú cuenta con pizza de productos del mar en diferentes variedades y cortes para complacer el gusto de la gente.
El chef en jefe, Jesús Romero aseguró que la calidad y el sazón nayarita es lo que diferencia a la familia Barra Mar de otros establecimientos de la zona, por lo que recomendó la sopa de mariscos y camarones Ely, pero también la distinta variedad de pizzas del mar, las cuales se elaboran con masa madre, entre otras especialidades.
Cantaritos Barra Mar abre todos los días de la semana, excepto los martes, en un horario de 12:00 a 20:00 horas y se ubica en el número 1190 de la carretera Chapala-Jocotepec, donde un inconfundible jarrito le advertirá que está en el lugar correcto.
Corredor gastronómico de Piedra Barrenada. Foto: Cortesía.
Redacción.- Restauranteros de la zona gastronómica de Piedra Barrenada en San Juan Cosalá, siguen sin aplicar la denominada “ley antitabaco”, por la falta de una notificación formal.
Laguna consultó a 10 establecimientos para conocer los cambios realizados tras la entrada en vigor el 15 de enero, de la reforma a Ley General para el Control del Tabaco, que prohíbe la publicidad en cualquier medio y el consumo en los lugares al aire libre donde haya “concurrencia colectiva”, como playas, terrazas y áreas de juego.
El ejercicio de consulta reveló que la mayoría de los restaurantes no han acatado la ley, pues el 70 por ciento aseguró que aún no realizan ningún tipo de modificación en su forma de operar, considerando la medida como “exagerada” e “innecesaria”.
“Es la vida de cada quien, aquí se puede fumar, está abierto, cada quien su organismo, hay gente que hasta se relaja con el cigarro. Pero si a alguien no le gusta el humo, que le digan a la persona y se salga, porque tampoco se trata de estar navegando con el olor”, dijo una entrevistada.
Otros coincidieron en que que si no hay un documento oficial que confirme dicho procedimiento, no harán cambios. Sin embargo, no ha habido implicaciones ni quejas por parte de sus comensales.
“Pues he escuchado (sobre la ley), yo soy fumador y hasta el momento, ningún cliente se ha quejado, pero ellos solos se salen, yo hasta que no vea un papel oficial, no tengo cómo decirle a un cliente que no está permitido”, compartió uno de los restauranteros.
Uno de los empresarios consideró como injusto que solo se “castigue” a los fumadores y no a los bebedores, si se habla de derechos y salud colectiva.
“Si tú me dices que no fume pero tú tomas, estarías privándome de algo que tú también estás haciendo, y viceversa. Si se trata de cuidar a la gente, creo que medidas injustas no les van a funcionar, la salud es la salud, y que prohíban fumar, no hará a la gente sana”, concluyó.
El vehículo se impactó en un poste frente a uno de los restaurantes de Piedra Barrenada. Foto: Semanario Laguna.
Redacción.- Un fuerte choque se registró la madrugada de este viernes en Piedra Barrenada, antes de llegar a la localidad de San Juan Cosalá, Jocotepec, hablándose de manera preliminar de dos personas fallecidas y otra más lesionada.
El percance sucedió poco antes de las 5 de la mañana, el vehículo en color azul rey circulaba en sentido de Chapala a Jocotepec, pero en una de las curvas de la zona restaurantera perdió el control y salió proyectado frente a uno de los restaurantes, quedando el auto estampado en un poste de cemento perteneciente a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Al lugar llegaron servicios médicos para trasladar a Jocotepec la persona que resultó lesionada, mientras que policía municipal se quedó a cargo para esperar la llegada del personal del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
Basura acumulada tras el servicio irregular en algunos de los locales de Piedra Barrenada. Foto: Cortesía.
Héctor Ruiz Mejía.- Irregular y sin frecuencia, es como la asociación civil, Prestadora de Servicios de Piedra Barrenada A.C., calificó el servicio de recolección de basura. Según los restauranteros, fue a partir de negarse a pagar entre mil 500 y dos mil pesos, que el servicio comenzó con deficiencias.
Durante una reunión realizada el 31 de mayo, integrantes de la asociación conformada por al menos 12 de los restauranteros, se dijeron inconformes con el presunto cobro que dicen les planteó el Gobierno de Jocotepec hace aproximadamente un mes.
Luego de la negación, los restauranteros denunciaron que el servicio de recolección de basura comenzó a transitar de manera irregular y cada vez menos frecuente, provocando la acumulación de basura en sus negocios.
Entre lo comentado, algunos restauranteros manifestaron que el cobro que se pretendía realizar era injusto, ya que el servicio de recolección de basura es el único apoyo que reciben del municipio, mientras que se dicen estar al corriente con el pago de sus impuestos.
“Nosotros pagamos todos nuestros impuestos puntualmente, que la licencia, cada vez más cara, que el predial, haciendo todo y qué beneficio o apoyo estamos recibiendo, esto era lo único en lo que nos apoyaba el Ayuntamiento”, dijo uno de los restauranteros durante la reunión, que pidió el anonimato para “evitar problemas”.
Respecto al monto que les habían propuesto, algunos consideraron el cobro parejo como injusto, argumentando que algunos restaurantes generan mucha más basura que otros. Pese a las inconformidades y la negación del pago mensual propuesto, los integrantes de la asociación aseguraron estar dispuestos a acceder a pagar lo que consideran “una aportación justa”, de acuerdo al metro cúbico de basura que generan.
Al final, los comerciantes coincidieron en que se debe buscar una solución al tema de la basura, mostrándose preocupados por las deficiencias que últimamente ha tenido el servicio de recolección, dando mala imagen a un punto clave del turismo en la ribera de Chapala y una de las zonas restauranteras más conocidas de Jalisco.
Sendero del arroyo encauzado a la altura de Piedra Barrenada. Foto: Héctor Ruiz.
Héctor Ruiz Mejía.- Restauranteros de la zona turístico-gastronómica de Piedra Barrenada, en San Juan Cosalá, exigieron a las autoridades de Jocotepec tomar precauciones en el arroyo cercano al área.
Aunque aseguraron que ya se realizaron labores para encauzarlo en dos salidas, uno de los cauces pasa a la altura del restaurante Las Gaviotas, por lo que afirmaron “sentirse preocupados”.
El propietario de uno de los restaurantes más afectados, cuyo nombre prefirió omitir, señaló que luego de la tromba del pasado 5 de octubre, registró pérdidas de más de 280 mil pesos, por los destrozos que generó el deslave, “ha sido una intervención mal ejecutada”, comentó.
El restaurantero explicó que la profundidad del encauce apenas rebasa el metro de altura, por lo que en cuanto comiencen las lluvias, dicho tramo será propenso a desbordarse por la poca profundidad.
“Lo que pasó en la última tormenta, incluso yo subí con un dron para capturarlo, fue que lo que hicieron ahí, es que de tanta agua que cayó, el encauce solamente se hizo como una laguna, por lo que cuando ya no pudo más, desembocaron todos esos litros y litros de agua”, aseguró.
Otros empresarios consultados también dijeron sentirse preocupados por este temporal de lluvias que se avecina, ya que persiste el temor a que se repita la situación del pasado octubre, donde no solo perdieron bienes inmuebles, sino que uno de los restauranteros casi fue arrastrado por la tromba.
“Todo, todo se llenó de lodo, piedras; la barra a tope, la cocina igual, la puerta principal la tuve que tronar para que desembocara todo el material y en el intento me arrastró la corriente, Protección Civil tuvo que aventarme una cuerda para que no me llevara hasta la laguna”, explicó el afectado.
Por estos motivos, exhortaron al Ayuntamiento de Jocotepec a tomar cartas en el asunto y realizar los dictámenes adecuados en dicho arroyo para descartar otro posible deslave, mientras aún hay tiempo, antes de que empiecen las tormentas.
Los aproximadamente 14 restaurantes que conforman la zona conocida como Piedra Barrenada esperan una gran afluencia de turistas durante Semana Santa. Foto: Héctor Ruiz.
Héctor Ruiz Mejía.- Jocotepec prevé un aumento del doble de la derrama económica que se genera en la zona restaurantera conocida como Piedra Barrenada, ubicada en San Juan Cosalá.
Tras la caída de aproximadamente el 75 por ciento en sus ventas en la temporada vacacional del año pasado, los 14 restaurantes que conforman la zona turístico-gastronómica, se preparan para volver a la “normalidad”.
Según Víctor Manuel Loza Ornelas, director de Turismo y Fomento Artesanal, tras dos años de un panorama complicado en el sector por la pandemia, se espera recibir este año a más de 18 mil visitantes durante la Semana Santa.
Loza Ornelas aseguró que la derrama económica que se espera es de aproximadamente cuatro millones de pesos por semana, es decir, ocho millones en total durante la temporada vacacional; en contraste con los dos millones de pesos que normalmente se generan por semana.
“La derrama económica en una temporada mala, digamos, va arriba de los dos millones de pesos, pero en esta temporada esa cantidad aumenta al doble”, aseguró el funcionario.
Por su parte, Saulo Rameño Castañeda, encargado del Restaurant Bar Piedra Barrenada, el original, el cual lleva más de 42 años funcionando, visualizó el panorama con optimismo.
“La verdad que los dos años pasados sí fueron bien complicados, incluso el año pasado, aunque estuvo abierto, no llegó lo que se esperaba; yo calculo que fue un 50 por ciento de disminución de ventas, pero este año se ve favorable”, dijo Rameño Castañeda.
El empresario agregó que incluso para este año, se tiene pensado modificar el horario durante los días santos, que suelen ser de los más concurridos del año, de las 8:00 de la mañana hasta las 8:00 de la noche, pues llegan a recibir hasta 600 comensales por día.
No obstante, el año que más impacto tuvo en el desplome de las ventas fue el 2020, donde incluso, por cuestiones de sanidad, autoridades de salud obligaron a los negocios a cerrar sus puertas por un mes.
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